Llegaron al mercado de Liniers 7.925 vacunos -de los que sólo quedó uno sin vender-, después de una sesión sin negocios debido a un bloqueo que realizaron trabajadores de frigoríficos. El mismo día de la semana pasada habían ingresado 7.094 animales.
La oferta de bovinos se ubicó en niveles habituales, a pesar de que se esperaba una entrada inferior a la normal tras una jornada con el mercado paralizado debido al bloqueo de los obreros de la industria cárnica, que reclamaban el pago de un subsidio prometido por el Gobierno.
La semana pasada la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne , que conduce José Fantini, había decidido bloquear el arribo de ganado para reclamar por un supuesto incumplimiento de un programa oficial vinculado a subisidios para el empleo.
Pero tras una reunión con Trabajo, los representantes de los Sindicatos de la Carne decidieron levantarla medida, pero resolvieron continuar en estado de «alerta y movilización». Manifestaron que «monitorearán la situación durante diez días, que es el plazo que el gobierno solicitó para dar respuesta al pedido de los trabajadores».
Según se advirtió «no se descartan medidas a nivel nacional si no se revierte la situación en corto plazo, ya que por ahora los subsidios benefician a unos 3.000 trabajadores».
Se trata de unas 200 horas de trabajo o el equivalente, que son 2.400 pesos, y para regularizarlos deben intervenir tanto el Estado como el sector empresarial para hacer efectivos los pagos.