Coordinado por el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) y con la presencia de los sectores involucrados, se desarrolló el viernes el taller para la construcción de planes operativos correspondientes a la primera línea del eslabón de Producción de Plantines contemplado en el Plan Estrategico para el Sector Yerbatero.
La construcción del Plan Estratégico para el Sector Yerbatero -aprobado por Resolución Nº 28/11 del INYM- demandó casi dos años de trabajo (2012 – 2013) conjunto entre los Gobiernos de las Provincias de Misiones y Corrientes, el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Universidad Nacional de Misiones (UNAM), quienes conformaron un equipo técnico que tuvo a su cargo la coordinación de las actividades para su definición. La etapa actual comprende la construcción de planes operativos para cada uno de los eslabones (Producción de plantines, Producción primaria, Secaderos, y Molinería y mercado).
En el eslabón de Producción de Plantines se estableció cómo líneas estratégicas: “Garantizar la producción, certificación, control y fiscalización del material genético suficiente para cubrir la demanda; propender a la Formalización de una organización de viveros; coordinar acciones con el sector primario para planificar y estimar la producción a mediano y largo plazo; consolidar la información existente sobre el sector productor de plantines (número de viveros, capacidad de producción actual y proyección futura, etc.); generar productos y precios diferenciados según calidad; mejorar la producción de plantines a través de capacitación e implementación de buenas prácticas y tecnologías apropiadas y proteger el material genético de yerba mate como patrimonio de la zona de origen”. En ese contexto, se enmarca, por ejemplo, el Registro de Viveros creado por el INYM en el 2011 (Resolución Nº 01/2011), en convenio con el Instituto Nacional de Semillas (INASE), con la finalidad de contar con datos estadísticos y poder realizar proyecciones sobre futuras producciones.
El tema convocante del encuentro del viernes – en la sede del INTA El Zaimán, en Posadas- fue el diseño de los planes operativos correspondientes a la primera línea estratégica del eslabón de Producción de Plantines, “Garantizar la producción, certificación, control y fiscalización del material genético suficiente para cubrir la demanda”. Participaron representantes de los organismos ya mencionados, del Instituto Nacional de Semillas; de la Universidad Nacional del Nordeste y de empresas privadas y cooperativas. Los presentes trabajaron en dos mesas temáticas para definir las acciones que permitan garantizar la producción del material genético de alta calidad suficiente para cubrir la demanda, y para garantizar la certificación, control y fiscalización del material producido.
Otras líneas de trabajo
Las líneas de acción implementadas para la efectivización del Plan Estratégico abarcan a todos los eslabones del sector yerbatero.
En el eslabón Producción Primaria, una de las líneas de trabajo establecidas en el Plan es “generar información pertinente y actualizada sobre el sector primario (número de productores, superficie, densidad, edad de los yerbales, producción anual, altas y bajas.)”. Atendiendo este punto específico, el INYM puso en marcha el inventario aerofotogramétrico de plantaciones de yerba mate, tarea adjudicada por licitación pública a la empresa Alta Territorial.
También se estableció, mediante el Plan Estratégico, “aumentar la productividad de los yerbales de los pequeños y medianos productores en forma sustentable a través de la implementación de buenas prácticas de manejo y tecnologías apropiadas, mediante asistencia técnica, financiera y capacitación”, una tarea que desde el INYM, con apoyo del INTA, se efectiviza a través del Programa de Renovación de Viejos Yerbales, más conocido como el 3×1, destinado a productores de hasta 10 hectáreas de superficie cultivada en estado de degradación, y consistente en plantar una nueva hectárea de yerba mate de origen policlonal con la mejor tecnología existente en un remanente de suelo de buena calidad, con insumos y asistencia que provee sin cargo las instituciones; y redireccionar tres hectáreas improductivas de yerba mate, al cabo de cinco años de iniciado el proceso, a otra actividad agrícola, ganadera o forestal, adecuada a las condiciones del suelo.
Otras de las líneas acordadas para Producción Primaria es “diseñar e implementar sistemas de cosecha apropiados a las diferentes condiciones de producción”, y “mejorar la eficiencia y las condiciones laborales de cosecha a través de capacitación y el uso de tecnologías”, lo que en la práctica podría traducirse en el Programa de Mejoramiento de la Cosecha de Yerba Mate del INYM, que abarca la entrega de carritos de arrastre y guinches de carga de raídos a prestadores de servicio, secaderos y productores que hayan entregado más de 150 mil kilogramos del producto en alguno de los dos últimos años y estén debidamente inscriptos en la institución.
En el marco de lo establecido por el Plan Estratégico para el eslabón Secaderos, cabe mencionar que el INYM puso en marcha el plan de Tecnificación del Proceso de Secado, a través del cual -desde el 2011- financia el equipamiento que necesitan los secaderos de yerba mate para utilizar el chip como fuente de calor, y a partir del presente año, el Programa de Playas Móviles, mecanismos de apoyo destinado a dar sustentabilidad y competitividad al sector secaderos.
Además, está en vigencia el Plan de Asistencia al Personal de Cosecha y Secanza de la Yerba Mate, a través del cual el INYM otorga indumentaria, consistente en pantalón, camisa y bota de cuero, a cosecheros y obreros que se desempeñan en las tareas de secanza.
Las líneas de trabajo contempladas en el Plan Estratégico para el eslabón Molinería y Mercado abarcan la “difusión de las propiedades de la yerba mate y modos de consumos para mercado interno y externo; estudiar y analizar potenciales mercados geográficos y consumidores; desarrollar y avanzar sobre nuevas oportunidades de consumo y nuevos productos, avalados científica y tecnológicamente; difusión y puesta en practica de las normas existentes; desarrollar normas de tipificación y de calidad con el resto de los eslabones y proponer su incorporación al Código Alimentario Nacional, implementando métodos de control para el cumplimiento de las mismas; y desarrollar políticas comerciales y de comunicación para difundir las propiedades de la yerba mate y sus formas de consumo”.
En el marco de esos lineamientos estratégicos, el INYM está llevando a cabo diferentes acciones y planes de acción. Por ejemplo, se está desarrollando una campaña de promociones a nivel nacional orientada a brindar información a los consumidores acerca de las propiedades benéficas del consumo de yerba mate para la salud, sus diversas formas de consumo, el proceso productivo que es natural y los nuevos usos, presentaciones y aplicaciones del producto entre otras cosas, y a nivel internacional, se están generando múltiples espacios de exhibición del producto al mundo; entre otros.
Paralelamente, el INYM pone a disposición de todos los interesados investigaciones de mercado (como la realizada en el año 2009, que reveló que la yerba mate está presente en el 98 por ciento de los hogares de la Argentina) e investigaciones sobre las propiedades del producto (el magíster en Tecnología de los Alimentos Luis Brumovsky, de la UNAM, reveló que quienes consumen yerba mate incorporan al organismo una importante cantidad de polifenoles totales; un estudio realizado en la Universidad Maza, en Mendoza, determinó que el consumo diario de mate facilita la disminución de colesterol total, el malo y los triglicéridos; por citar algunas conclusiones de investigaciones realizadas y en marcha sobre el producto).