Sin fuentes de financiamiento para costear los gastos de la campaña de este año, los productores tuvieron que deshacerse de los granos que abarrotaron en bolsas de silaje el año pasado.
El dato de la molienda nacional revela que, según lo expresa la especialista de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) Lorena D’Angelo, “en la campaña anterior había quedado mucho remanente de soja que este año salió porque los productores no encontraron otras formas de financiamiento”.
En abril de cada año comienza la nueva cosecha de soja y en ese momento se calcula el remanente del año anterior, que antes de que entrara la cosecha de 2009 era de alrededor de 7 millones de toneladas. Ese volumen estaba repartido en partes semejantes entre las industrias de molienda –como Cargill, Bunge y Molinos– y las silobolsas que tenían los agricultores en el campo. Hoy, el ‘pase’ para el año próximo se calcula en 3,5 millones de toneladas, es decir que el volumen de soja para comercializar en 2010 ya cuenta con la mitad de las reservas con las que arrancó este año.
Por las mayores ventas hechas durante 2009, la molienda de soja solamente cayó un 7% entre enero y octubre, respecto del ciclo anterior, aunque la cosecha que entró entre abril y mayo fue 38% menor a la de 2008. Los datos reflejan que para paliar la merma de producción y financiarse, los agricultores tuvieron que vender reservas.
En los primeros diez meses del año la molienda de soja fue de 24,8 millones de toneladas contra un volumen de 26,7 millones entre enero y octubre de 2010, según datos de la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara).
Dos hechos fundamentales hicieron que los productores se ‘sentaran’ sobre la soja en 2008: la protesta contra las políticas oficiales tras el duro enfrentamiento de marzo por las retenciones móviles y la necesidad de conservar los granos como ‘caja’ frente a una siembra que ya se vislumbraba mala por la sequía que terminó recortando la cosecha en más de un tercio. Más adelante en el año se sumó el recorte a la mitad del precio de todos los commodities, que hoy recuperaron parte de su valor anterior a la crisis.
El grueso de las ventas de la soja se hace en el momento de la cosecha, por los compromisos asumidos con compradores –acopios y exportadores– y la necesidad de cancelar los préstamos para insumos y arrendamientos, que se pagan con la venta de la cosecha. Pero los números dan cuenta de que después de esas ventas ‘obligadas’ los productores se guardaron la soja de una gran cosecha (la 2007/08) que dio como resultado 52 millones de toneladas.
Pese a las mayores ventas de los productores este año, por la caída de la cosecha total a 32 millones de toneladas, las exportaciones del complejo sojero (grano, aceite y harina) cayeron 26% este año hasta octubre, según datos de Senasa.
Sin estadísticas
Desde enero de este año la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca) no publica las existencias de granos en el circuito comercial como lo hacía la antes Secretaría de Agricultura, hoy Ministerio. Por eso, el cálculo de 3,5 millones de remanente proviene de estimaciones privadas.
Fuentes El Cronista Comercial10.12.09 El dato de la molienda revela que costearon los gastos de esta campaña con los granos que tenían acopiados. El »crushing» cayó sólo 7% con una cosecha de soja casi 40% menor.
Sin fuentes de financiamiento para costear los gastos de la campaña de este año, los productores tuvieron que deshacerse de los granos que abarrotaron en bolsas de silaje el año pasado.
El dato de la molienda nacional revela que, según lo expresa la especialista de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) Lorena D’Angelo, “en la campaña anterior había quedado mucho remanente de soja que este año salió porque los productores no encontraron otras formas de financiamiento”.
En abril de cada año comienza la nueva cosecha de soja y en ese momento se calcula el remanente del año anterior, que antes de que entrara la cosecha de 2009 era de alrededor de 7 millones de toneladas. Ese volumen estaba repartido en partes semejantes entre las industrias de molienda –como Cargill, Bunge y Molinos– y las silobolsas que tenían los agricultores en el campo. Hoy, el ‘pase’ para el año próximo se calcula en 3,5 millones de toneladas, es decir que el volumen de soja para comercializar en 2010 ya cuenta con la mitad de las reservas con las que arrancó este año.
Por las mayores ventas hechas durante 2009, la molienda de soja solamente cayó un 7% entre enero y octubre, respecto del ciclo anterior, aunque la cosecha que entró entre abril y mayo fue 38% menor a la de 2008. Los datos reflejan que para paliar la merma de producción y financiarse, los agricultores tuvieron que vender reservas.
En los primeros diez meses del año la molienda de soja fue de 24,8 millones de toneladas contra un volumen de 26,7 millones entre enero y octubre de 2010, según datos de la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara).
Dos hechos fundamentales hicieron que los productores se ‘sentaran’ sobre la soja en 2008: la protesta contra las políticas oficiales tras el duro enfrentamiento de marzo por las retenciones móviles y la necesidad de conservar los granos como ‘caja’ frente a una siembra que ya se vislumbraba mala por la sequía que terminó recortando la cosecha en más de un tercio. Más adelante en el año se sumó el recorte a la mitad del precio de todos los commodities, que hoy recuperaron parte de su valor anterior a la crisis.
El grueso de las ventas de la soja se hace en el momento de la cosecha, por los compromisos asumidos con compradores –acopios y exportadores– y la necesidad de cancelar los préstamos para insumos y arrendamientos, que se pagan con la venta de la cosecha. Pero los números dan cuenta de que después de esas ventas ‘obligadas’ los productores se guardaron la soja de una gran cosecha (la 2007/08) que dio como resultado 52 millones de toneladas.
Pese a las mayores ventas de los productores este año, por la caída de la cosecha total a 32 millones de toneladas, las exportaciones del complejo sojero (grano, aceite y harina) cayeron 26% este año hasta octubre, según datos de Senasa.
Sin estadísticas
Desde enero de este año la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca) no publica las existencias de granos en el circuito comercial como lo hacía la antes Secretaría de Agricultura, hoy Ministerio. Por eso, el cálculo de 3,5 millones de remanente proviene de estimaciones privadas.
Fuentes El Cronista Comercial