Esta es una buena noticia, si se continúa con una eficiente coordinación internacional en la reunión del G-20 y un desaliento al creciente proteccionismo. Los precios internacionales del aceite de girasol mejoran para el segundo semestre. Comienza a evidenciarse algún entusiasmo en el sector exportador. La política pública nacional sigue discriminando a la cadena de valor del girasol.
Al cambiar el ánimo de los agentes económicos y brindársele una oportunidad de inversión a tenedores de dólares y títulos públicos, se especula con una rápida mejora en el valor de los activos. No debe olvidarse que los que compraron papeles, con un barril de petróleo a U$S 147 y hoy los tienen en sus balances, tuvieron como contraparte inversores que se los vendieron, habiéndolos adquirido por cifras inferiores. Es imprescindible, para la recuperación económica, que estos “ganadores” comiencen a invertir sus utilidades en activos baratos, al haber logrado una “sociedad” con el sector público y por ende, con los contribuyentes.
Una menor tasa de interés, resultado de una exitosa operación como la descripta, redundará en un valor debilitado de la divisa norteamericana, que siempre será propicio a mejores precios de las commodities. Este “ambiente” es el que viviremos, por lo menos hasta la reunión del G-20, el 2 de abril, donde se tomarán decisiones de colaboración entre países, tendientes a: a) evitar el contagio de medidas proteccionistas, que podrían profundizar la crisis (se espera una caída del 9%, cifra inédita, en el comercio mundial, para 2009), b) generar ampliaciones de capital para organismos internacionales y c) mejores regulaciones para la operatoria financiera globalizada.
Siempre es mejor que estas reuniones se lleven a cabo en un marco distendido, merced a la recuperación que, se espera, podría continuar en los indicadores bursátiles a nivel mundial. Este sería el primer “efecto riqueza” positivo luego del mencionado aumento registrado en febrero de las operaciones inmobiliarias en los EEUU.
En este marco, el precio del aceite de girasol, en Rótterdam, subió a 800 U$S/t, para posiciones cortas y 840 U$S/t para fines de 2009. Registra una prima del 3,8 % con respecto al de soja y cotiza en paridad, si se considera el de canola. Hace un año, las primas eran del 26,2 y del 22,6% respectivamente, lo cual indica no sólo la extrema escasez de girasol, registrada en la campaña pasada, sino también la priorización, en
Conviene recordar que si nuestra producción ingresara a los mercados del Hemisferio Norte a valores de, digamos, 820 U$S/t promedio, se estaría percibiendo un precio 18% superior al promedio histórico decenal, previo al inicio de la “burbuja”.
Mercado local
La industria exportadora ha comenzado a mostrar cierto interés, en vista de la rápida digestión que está experimentando la cosecha record del Hemisferio Norte, tanto para nuestro aceite como para el de canola (también empleado para biodiesel).
El precio FOB fijado por
En el disponible, se paga 188 U$S/t, en tanto, la posición marzo, en el término, cerró a 190 U$S/t.
La cosecha
Según el Informe de
Tanto en el Centro-Norte de Santa Fe como en
La caída en la producción nacional será del 35%, con respecto a la campaña pasada. Dicha baja se amplía al 39%, si se la compara con lo obtenible, en condiciones climáticas normales y con la intención de siembra que originalmente tuvieron los productores (8% superior a la efectivamente lograda).
Informe del Lic. Jorge Ingaramo, economista asesor de