Aspecto Comercial: El principal impacto de la demora en el inicio del acopio es el incumplimiento de compromisos frente a clientes con la consiguiente pérdida de credibilidad y previsibilidad, lo que puede impactar directamente sobre volúmenes de producción para la campaña siguiente. Habiendo, inclusive, riesgo de perder clientes. Esto, sumado a la gran oferta de Burley que existe actualmente en el mundo hace peligrar la continuidad de la demanda futura en Misiones.
Todos los productores conocen del riesgo que representa tener tabaco ya listo para su venta dentro de sus galpones. Las tormentas, granizos, riesgo de contaminación con materias extrañas e inclusive eventuales robos son factores que amenazan al producto terminado. Se debe recordar que las empresas acopiadoras poseen una capacidad máxima de compra diaria dada por el espacio en sus bodegas, por lo tanto cuando más tarde se comience el acopio más tiempo estará el tabaco expuesto a estos posibles peligros.
Aspecto Social: Normalmente en esta época ya circula dinero en la colonia proveniente de la venta del tabaco. Este año debido a su demora está totalmente paralizada la cadena de pagos. El productor no cobra, no puede hacer frente a deudas contraídas (almacén, energía eléctrica, etc), no puede adquirir nuevos bienes en el pueblo (ropa, calzados, muebles, etc). Debemos recordar que en situaciones normales el productor además del precio de acopio ya estaría percibiendo los primeros pagos del retorno. Todo esto se palpa día a día en los pueblos del interior cuya actividad económica está prácticamente estancada.
Aspecto Técnico: Las empresas manejan un interesante paquete técnico para la conservación y recuperación de suelos. Esto involucra entre otras cosas provisión de semillas para cubiertas verdes, calcáreo para corrección de pH, etc. Dada la incertidumbre que se atraviesa no es posible avanzar con estos planes de acción, por lo tanto muchos productores no podrán contar con esta valiosa herramienta.
Como es sabido las plantas tienen un ciclo condicionado por factores ambientales (temperatura, humedad de suelo, etc.). Existen distintas áreas de producción en la provincia; algunas de las cuales, por tener un menor riesgo de heladas, realizan siembras tempranas. Esto es posible cuando se conoce el volumen que se requiere y los insumos necesarios para alcanzarlo llegan a tiempo a la chacra del productor. Este año frente a la imprevisibilidad del volumen está paralizada la distribución de insumos, por lo tanto el productor no podrá contar con los insumos en igual tiempo que campañas anteriores.
Como se evidencia, toda demora innecesaria en el comienzo del acopio de tabaco no perjudica solamente a las empresas acopiadoras sino a la sociedad en su conjunto y fundamentalmente al productor tabacalero, ya que no solamente tiene efectos directos en esta campaña sino que compromete fuertemente al futuro de la actividad en la provincia.