El hecho fue denunciado a las 15.00 por Marcelo Krieger (49). El hombre relató que momentos antes constató que el lote 76, propiedad de su padre Ricardo, había sido alcanzado por un incendio. Las llamas consumieron cinco hectáreas de pino de 25 años, otras tres hectáreas de forestación de tres años y tres hectáreas de yerba mate.
Posteriormente se pudo establecer que el fuego se inició en el lote 95, propiedad de Carmen Noremberg, cuando el cuidador Olmiro González realizaba tareas de limpieza. En esa chacra, las llamas consumieron 15 hectáreas de capuera, cuatro de yerba mate y una de pino.