En su presentación ante el Senado de la Nación, el Jefe de Gabinete de Ministros, Aníbal Fernández, se refirió a la caída del stock bovino producida en los últimos años, aunque la explicación que brindó dista de las que se escucha de los ámbitos agropecuarios.
El tema ganadero lo introdujo la senadora cobista, Lauta Montero, ex ministra de economía de la provincia de Mendoza, al señalar que una de las medidas que más repercutió en la caída del stock vacuno, se dio por la intervención estatal en el precio de la hacienda en pie.
Fernández, minimizó en su respuesta el efecto precios y en cambio lo adjudicó a un problema estructural. “Me parece que nosotros no somos lo suficientemente consecuentes con una Argentina que tiene un nivel de ganado lo suficientemente importante y que a mí me gustaría que lo viéramos con alguna prudencia”, arrancó el funcionario.
En el caso puntual del análisis por “la fijación de precios y demás cosas, a Liniers solamente ingresan aproximadamente diez mil cabezas de ganado de lunes a jueves de las cuales solamente fijan precios cuatro mil”.
La cuenta del jefe de ministros arrojó que mensualmente la referencia de precios del Mercado de Hacienda de Liniers se da en 64.000 cabezas mensuales.
“¿Saben cuántas cabezas se faenan en este país por mes?”, preguntó luego: “1.200.000 cabezas”, respondió. “De qué estamos discutiendo”, agregó Fernández. Aunque aceptó después que “la discusión se tiene que dar” sobre la cuestión ganadera.
Luego reconoció que “es cierto que hay una disminución del stock ganadero”, pero basó la afirmación en otro diagnóstico al que tradicionalmente se expone desde la dirigencia ruralista que asocian la caída a las “malas políticas” del kirchnerismo.
Fernández apeló a un informe del INTA de marzo de este año -“Situación y Perspectiva de la carne vacuna para un programa nacional de carnes”- donde se sostiene poco menos que el espacio físico para la producción ganadera que existe hoy no permite en las circunstancias actuales un rodeo mayor.
El Jefe de Gabinete indicó que ese informe el INTA concluye que “la oferta forrajera pastoril actual sobre la que se desarrolla la cría y recría bovina no permite un stock superior al actual” que el funcionario estimó en 49 millones de cabezas.
De allí que Fernández, análogamente a lo que se sostiene desde el Ministerio de Agricultura, la recuperación sustentable del rodeo vacuno, “va a surgir del aumento de cantidad y calidad de la oferta forrajera a futuro”.
En esa dirección defendió el incremento en el peso mínimo de faena de 260 a 300kg, algo “que venía siendo pedido por los productores desde hacía mucho tiempo”, remarcó, al igual que los aumentos de precios en el kilo vivo que también se produjeron.
“También es cierto que el consumo de carne ha caído”, admitió Fernández, y agregó que hay “una inversión cercana a los 600 millones de pesos con tasas subsidiadas por el gobierno para mejorar el stock ganadero”, con el objetivo de aumentar, entre otras cosas oferta forrajera y la productividad.
“Nos encontramos en un punto muy particular de la situación pero que estamos convencidos que tiene que ser revertido”, concluyó el Jefe de Ministros.
Ante la pregunta de la senadora Liliana Negre de Alonso sobre qué se podía esperar de Europa por el incumplimiento de la cuota Hilton (2009/10) el ministro aseguró que no habría consecuencias en el plano bilateral.
“No existe ninguna sanción” para el uso de las ventajas arancelarias de la cuota Hilton, sostuvo Fernández invocando el acuerdo. La Argentina si quisiera podría no vender esos cortes, explicó el Jefe de Gabinete.
Sin embargo, compartió que el perjuicio se daría para la Argentina por menores exportaciones realizadas, pero sobre este punto indicó que a partir del nuevo sistema creado para la distribución, no habría dificultades en el cumplimiento de la cuota en lo sucesivo.