La noticia ha sido aplaudida por grupos ecologistas, que ven en la iniciativa una voluntad del Gobierno para recuperar lo poco que queda de la Mata Atlántica original. Si bien ya ha sido destruido el 17% del territorio original de la selva amazónica, del de la Mata Atlántica, que cubría como un manto casi todo el suelo nacional a la llegada de los portugueses, hoy se conserva sólo un 6%. El resto ha sido destruido por la construcción de ciudades y por la industria ganadera.
A la Mata Atlántica pertenece el árbol pau-brasil, que dio nombre al país. Su vegetación y fauna son distintas de las de la selva amazónica, pero su presencia es igualmente importante para evitar el desbordamiento de los ríos y proteger las especies que sólo existen en sus bosques.
En el corredor verde que se creará en Río de Janeiro se ha detectado, por ejemplo, la presencia de manadas de tigres pardos (onças) que suelen atacar a los rebaños de ovejas y que han podido ser fotografiados gracias a unos sensores colocados en el bosque. Algunas de esos tigres son de color negro y rojo, y están considerados como unos de los más bellos mamíferos del mundo.
La coordinadora de Áreas Protegidas de la ONG The Nature Conservancy (TNC, sus siglas en inglés), Analuce Freitas, ha presentado un estudio en el que asegura que en una de las regiones protegidas por el corredor verde existen hasta 22 especies de reptiles y anfibios, 131 de aves y 46 de mamíferos típicos de la Mata Atlántica. Algunos de ellos figuran en el Libro Rojo de la fauna brasileña, que recoge las especies en peligro de extinción, publicado en 2008 por el Ministerio de Medio Ambiente. El ministro Minc agregó que algunos de los tramos del corredor verde deberán recibir una intensa atención para que se recuperen, ya que se encuentran en pésimas condiciones.
Fuente: El País