La agenda se rubricó en el Centro Biotecnológico Agroforestal Chaco, en el marco de una jornada dedicada especialmente a la temática.
El presidente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Dr. Roberto Salvarezza, participó de la primera jornada en el Centro Biotecnológico Agroforestal Chaco para rubricar una adenda por semilla de algodón y la firma de un convenio por regalías. En la ocasión también se celebró la reunión de CONABIA y la quinta reunión del grupo de trabajo entre Argentina y China en Agrobiotecnología y Bioseguridad. Estuvieron presentes en la ceremonia –que se realizó en las instalaciones del Centro contiguas a la Escuela de Jardinería Nº 13- el gobernador provincial, Cr. Jorge Capitanich, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Lino Barañao, y el director del Centro, Jorge Ruchesi.
“Conocí a José Ruchesi hace dos años, con el desafío de tomar las semillas y llegar a las plantas; hoy propagamos este convenio y llegamos a la producción del algodón”, destacó el Dr. Salvarezza durante su alocución, en la que manifestó que “esta Escuela de Jardinería se convirtió en el último tiempo en un socio estratégico del CONICET. Así como estamos asociados a institutos como el Max Planck de Alemania o con otros institutos europeos”.
En discurso, el presidente del CONICET destacó el crecimiento exponencial científico luego de la debacle del 2001, momento en el que la amenaza de cierre estaba latente en el organismo, hasta esta parte: los 10 mil becarios y 9 mil investigadores diseminados actualmente desde La Quiaca a Tierra del Fuego. “Buscamos la integración nacional en materia de ciencia, y para eso nuestro mayor desafío es devolver los aportes que hace la ciencia a la sociedad, para que se utilice ese conocimiento”.
También, resaltó que hoy en día 600 pymes nacionales estén requiriendo los servicios de los investigadores del Consejo. “En la última década tuvimos un incremento del 45% en materia de transferencia. Eso significa que las empresas locales ya nos tienen como referencia”, indicó.
Salvarezza anunció en este sentido que se está trabajando para crear una nueva empresa dedicada a biotecnología vegetal –así como en 2013 comenzó a operar Y-TEC, la empresa del Consejo asociada con YPF-, que se llamara Q-ARAX y contará con cobertura geográfica y capacidades para abordar el desarrollo de cultivos y transferencia de tecnologías en las distintas regiones del país. Además de la participación del CONICET, esta empresa de capitales nacionales tendrá como socios a la Escuela de Jardinería, la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres, de Tucumán, Agrogenética Riojana SAMEP, y Biofábrica de Misiones S.A.
A su turno, el ministro Lino Barañao expresó la importancia de la transferencia en materia científica, y de cómo la misma pasó, con los años, a ser valorada en el ambiente de la investigación.
Por último, el gobernador Capitanich manifestó la enorme valoración de la política científica llevada adelante en la última década a partir del fomento del gobierno nacional, y puntualmente la importancia del convenio y la adenda rubricada entre el CONICET y la Escuela de Jardinería para impulsar el cultivo del algodón, típico de Chaco. “Acá tenemos un lema, que es `sembrando algodón, cosechando moda`. Este convenio nos permitirá darle mayor impulso y expandir la industria textil a toda la provincia, para que no esté atomizada solamente en la capital provincial”.
Estuvieron presentes también en el acto el Lic. Martín Lema, director de Biotecnología del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca y la secretaria de Integración Nacional, María del Carmen Alarcón.