Los cortes porcinos vuelven a ser populares, al poder pagarlos un 25% más baratos que los de vaca. A diferencia de otras carnes, es una de las que menos aumentos ha registrado en los últimos tres meses.
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“Yo le pongo sal, pimienta y mucho limón. Le corto unas cebollitas, se las pongo alrededor y listo”. Esa es la receta que sigue Mirta, una vecina de Las Heras que de un tiempo a esta parte viene prefiriendo comprar cerdo en vez de novillo por la creciente diferencia de precios entre los dos tipos de carne. Es que, en ciertos casos, el kilo del primero se consigue un 25% más barato o más de lo que cuestan algunos cortes del segundo.
En enero de 2010, Cristina Fernández de Kirchner pronunció una de las frases más jugosas que ha dado su profuso discurso. En un acto con productores porcinos realizado en la Casa Rosada, la Presidenta aseguró que “la ingesta del cerdo mejora la actividad sexual”, catapultando al cerdo al estrellato.
Hoy, casi cuatro años después, los cortes porcinos vuelven a ser populares, ya no por sus supuestas propiedades afrodisíacas, sino por su bajo precio si se lo compara con la carne de vaca.
Una recorrida de UNO por los puestos del Mercado Central reveló que, en promedio, el kilo de cerdo se vende a $60. En Rizzo, el kilo de vacío, de punta de espalda o de costillas cuesta $60, mientras que en Nazer el pernil se consigue por $58 y las costeletas y las costillas se cobran a $65.
“La gente lleva un poco de vaca y un poco de cerdo, en especial la que no está acostumbrada al cerdo. Pero se va vendiendo”, explicó don José, uno de los carniceros del último puesto mencionado.
Según explicó, la última vez que aumentó la carne porcina fue hace un mes, cuando se incrementó el valor del cerdo en pie. La suba repercutió en los mostradores en valores cercanos al 15%, pero desde esa oportunidad se han mantenido.
Pero no ha sucedido lo mismo con la carne de vaca. El empresario José Micheli reconoció el viernes último en declaraciones a radio Nihuil que desde las fiestas de fin de año a esta parte los incrementos en los cortes vacunos rondan –cuando no superan– el 20%.
En los supermercados
En los supermercados, los precios varían según las cadenas y las calidades de los productos. En el Vea de San Martín y Santiago del Estero, de Ciudad, ayer había un puñado de bandejas con pechito con manta, carré con hueso y costeletas a $65,69 y apenas dos de matambre a $90,39. Según explicó un repositor, la poca oferta se debía a que la empresa pone este producto los viernes.
Competidores
Carne vacuna. El cerdo sale, entonces, a competir con clara ventaja con ciertos cortes vacunos. Los más caros como el filet o el lomo superan los $80 y otros más económicos como la blanda (nalga, bola de lomo, cuadrada) no bajan de $70.
Pescado. Incluso en la carrera por ganar el bolsillo del consumidor también se posiciona la merluza, que se consigue a $55 en el Mercado Central y a $42 en las pescaderías de barrio.
Pollo. Con el único que el cerdo no puede ni siquiera medirse es con el pollo, cuyo precio de oferta arranca en los $21.
Por Cecilia Amadeo
amadeo.cecilia@diariouno.net.ar