El mismo instrumento legal permite, en tanto, la pesca de subsistencia, “la que será entendida como la practicada por el pescador, con línea de mano y únicamente desde la costa o a bordo de una canoa a remos”, según consigna la normativa.
La medida se tomó a partir del actual estado del río Uruguay que en su situación de bajante extraordinaria, favorece la captura de peces por parte de los pescadores de ambas orillas, debido a la poca cantidad de agua y que incide de manera negativa sobre las poblaciones ícticas.