Las principales jugueras que operan en
Materia prima
El inicio de la temporada no fue el mejor. El problema comenzó con la materia prima. En la campaña que acaba de concluir, la cosecha de manzanas y peras podría promediar, según los operadores del sector, una caída del 25 por ciento en relación a la anterior. A ello se sumó la aparición en el mercado de un nuevo e incipiente jugador, lo que dio lugar a una carrera entre las empresas por la compra del insumo básico.
Para la industria juguera, los efectos de la caída en la producción de fruta se potencian. Cuando la fruta es abundante, las empacadoras descartan a discreción, eligiendo sólo lo mejor y potenciando el abastecimiento de las industrias derivadas. Cuando el proceso es el inverso, se embala a discreción calidades que en circunstancias normales serían descartadas. Si la merma de cosecha es del 25 por ciento, la restricción para industria puede llegar al 40 por ciento. El resultado es la escasez y, consecuentemente, la disparada de los precios de la materia prima.
Hasta 110 dólares la tonelada
El dato es muy bueno para los productores primarios porque, adicionalmente, el precio del descarte empuja el piso de valor para la fruta de mayor calidad. Como las jugueras tienen costos fijos y compromisos internacionales, compiten por la materia prima. En lo que va de la temporada, por la tonelada de descarte de manzanas puesta en las industrias se pagó hasta 110 dólares y por la de peras hasta 70 dólares, valores a los que debe adicionársele el IVA. Una lectura rápida de la situación puede llevar a la conclusión que el alto costo pagado por la fruta no se debió sólo a la escasez relativa, sino a una estrategia de las firmas concentradas para desalentar el ingreso de un nuevo operador, descripción que no deja de ser especulativa.
Mercado Internacional
El segundo problema de la actual temporada, después de los relativamente altos precios pagados por la fruta, es que el leve aumento de los precios internacionales del concentrado de manzanas y peras respecto del año anterior no compensa la pérdida de competitividad local. Es un hecho que el tipo de cambio se recupera más despacio que los costos internos.
Vale recordar que a tono con la sobrevaluación de las commodities y su crisis, el precio del galón del jugo concentrado de manzana llegó a superar los 10 dólares en el año 2008 y se derrumbó hacia fines del mismo año por debajo de los 5 dólares, con lo que el precio del galón tocó en un mismo año su techo y su piso históricos, con las distorsiones que esto genera en los mercados. En 2010 los precios no siguen cayendo, pero se recuperan muy despacio, actualmente la cotización FOB ronda los 6 dólares el galón.
Problema chino
Hoy las expectativas están puestas en lo que sucederá con China. La potencia asiática es el principal productor de manzanas del mundo y también el de jugos, sector en el que representa ya más del 60% del mercado global, y en el que Argentina ocupa actualmente una participación del
La capacidad de producción china supera 1.000.000 de toneladas de jugo concentrado de manzana, volumen que ya produjo en los últimos años, aunque la caída de la cotización internacional lo llevó a reducir hasta un 40 % su producción en la última cosecha, es decir unas 600.000 toneladas de concentrado.
En los últimos 10 años se instalaron en China más de 50 plantas controladas por capitales privados pero manejadas con estructuras mixtas en las que participa el Estado local. Sus ventas están completamente cartelizadas y son formadoras de precios en el mercado mundial.
Hasta hace algunos años los jugos chinos eran básicamente de baja acidez, lo cual significaba una ventaja para el jugo argentino dada su mayor acidez y la demanda del principal mercado importador, Estados Unidos, destino casi excluyente de los jugos argentinos. Pero también en los últimos años, los jugos chinos, con el aporte de nuevas plantaciones de manzanas Granny Smith, aumentaron sus niveles de acidez ganando competitividad.
Incertidumbres
El gran interrogante para la evolución de los precios del galón en la presente temporada son las fuertes heladas registradas en el país asiático a fines de abril y que llevaron a que el propio gobierno chino reconozca fuertes caídas en la producción. En la provincia de Shaanxi, la mayor productora de manzanas de China y dónde, según
En este punto, los empresarios norpatagónicos tienen perspectivas enfrentadas. Algunos creen que las heladas significarán una nueva baja de la producción china, con el consecuente aumento de los precios internacionales. Otros, en cambio, creen que la producción China no variará, porque su producción juguera ya había descendido en los últimos dos años como consecuencia de la caída de los precios internacionales, redestinándose internamente a otros destinos la fruta en función del precio que obtenga en cada mercado.
Las empresas jugueras del Alto Valle creen que si los precios del jugo que elaboran no aumentan, este será un año de quebrantos debido a los altos precios ya pagados por la fruta.
– ¿Por qué compraron a precios que sabían existía la posibilidad de no recuperar? –preguntó FruticulturaSur.com a uno de los principales empresarios del sector.
Porque las plantas tienen que cubrir costos fijos, no pueden dejar de operar, y porque tenemos que cumplir con compromisos internacionales.
¿De cuánto tendría que ser el precio del galón para que no tengan pérdidas?
No menos de 8 dólares.
Fuente: Friticulturasur por Claudio Scaletta