21.06.16Oscar Alloatti, secretario de Agricultura Familiar de la Nación, en diálogo con Aldo Puig, en El campo tiene la palabra radio, enfatizó en el objetivo de lograr que los pequeños productores puedan desarrollar sus explotaciones con un máximo potencial y enriquecer la vida de las comunidades rurales de las que forman parte.
Que encuentren mejoras en las condiciones no sólo de trabajo, sino de existencia. Una charla de visión profunda.
Oscar Alloatti, es oriundo de Espinillo, un paraje pequeño del departamento Paraná, Entre Ríos. Es en la actualidad quien rige los destinos de la Secretaría de Agricultura Familiar de la Nación. Esta mañana, en diálogo con El campo tiene la palabra, le dijo a Aldo Puig, que fue convocado por las autoridades del gobierno nacional, entre otras cuestiones, por ser un gran conocedor de la vida de los pequeños productores y sus problemáticas. "Soy alberdino (egresado de la Escuela Rural Alberdi de Paraná) y llevo en mi alma la impronta de la granja, de la manufactura de productos regionales, de la vida familiar rural del pequeño productor que desde hace tiempo le pone trabajo y valor a lo que genera y sale a venderlo. Y a su vez, lo que gana lo reinvierte en los comercios de sus comunidades. Sabemos que es un círculo virtuoso. Lo sé, Lo he vivido. Por eso deseo profundamente poder aportar políticas que permitan que estos productores y sus familias tengan mejores condiciones de vida y se queden en el campo", remarcó Alloatti.
La Secretaría de Agricultura familiar, asiste a más de 200 mil productores registrados y cuantificados en diferentes zonas del país. Cuentan con 22 delegaciones provinciales y un importante número de zonales en cada región. "Nosotros sabemos que por cada productor, tenemos bajo nuestro paraguas a un número de por lo menos 6 personas entre hijos y esposas, porque se trata de emprendimientos familiares donde las tareas se comparten entre los integrantes", aclaró el funcionario nacional.
En referencia a las condiciones con las que se encontraron al tomar la cartera nacional, Alloatti, dijo que el panorama era desalentador por la falta de recursos y el exceso de contratados que no tenían funciones claras. "Sólo en el 2015, que fue un año electoral se firmaron cientos de contratos nuevos, de gente que fue a trabajaar a la campaña electoral y luego no tenía una ocupación acorde a la delegación zonal. Nosotros decidimos ir revisando las situaciones caso por caso y lo seguimos haciendo. Actualmente hay más de 1.300 personas trabajando con nosotros en el país", destacó