La cifra de bajas ganaderas consignada abarca todo el país junto la quiebra «de 11 mil productores», mientras que aseguró que en la «provincia de Buenos Aires se perdieron 3.6 millones» de animales.
Las declaraciones fueron pronunciadas durante la inauguración de
El dirigente expresó su «solidaridad con los productores y poblaciones del sudoeste bonaerense que han sufrido y sufren los efectos de la tremenda sequía que los afecta».
«Como productor de la zona he padecido como ustedes la falta de lluvias durante estos últimos años», dijo.
Pero, también «como ustedes, el duro castigo de las políticas de gobierno que nos imponen un modelo cuyo nefasto resultado conviene recordar», destacó.
Agregó que «la industria frigorífica se encuentra quebrada con plantas cerradas y 14.000 obreros a punto de perder sus empleos.
Las exportaciones cayeron un 46 por ciento y dejamos de cumplir 40 por ciento de la cuota Hilton por no entregarse los ROES en tiempo y forma».
«Los consumidores, a quienes se les dijo que el modelo era para cuidar su mesa, se encontraron con menos carne y mayores precios por la escasez», señaló.
También manifestó que «Hoy el Uruguay consume más carne per capita que nosotros».
En Agricultura, añadió «sabemos que la cosecha pasada de trigo fue la de menos área sembrada en los últimos 100 años».
«La magra cosecha sumada a las retenciones provocaron fuertes quebrantos a los productores», agregó.
Para Llavallol, «nuevamente los engañó el Gobierno: anunció la devolución de las retenciones a 27.000 pequeños productores y solo cobraron 50», especificó.
El dirigente reclamó «retenciones cero para el trigo: no la promesa de una devolución que nunca se cumple».
«Las retenciones son una discriminación distorsiva que debe desaparecer. Para eso hemos luchado todos juntos en las rutas», añadió.
Los pronósticos «de producción de trigo para esta campaña ratifican la insistencia por parte del gobierno de políticas equivocadas: la siembra alcanzó un 30 por ciento menos de hectáreas que los promedios de años anteriores».
«No solo tenemos el castigo de las retenciones sino que además continúan cerradas las exportaciones y por lo tanto hay menos ingresos y a veces imposibilidad de vender para pagar las obligaciones», explicó.
Llavallol considera «a los pequeños productores se los debe apoyar mediante una adecuada política crediticia e impositiva, pero siempre pensando que nadie luchó para mantener las retenciones, sino todo lo contrario».