15.10.13Durante los días 24 y 25 de septiembre se llevó adelante la segunda edición del Congreso de Valor Agregado en Origen.
El mismo estuvo organizado por el INTA y tuvo lugar en la Nave de las Ciencias, en el marco de la megamuestra Tecnópolis, en Buenos Aires. Estuvieron presentes 1200 personas llegadas de todo el país, que durante las dos jornadas pudieron tomar conocimiento de 23 experiencias seleccionadas de las distintas regiones argentinas. Hubo también un espacio también para un foro de intendentes y distintas charlas con especialistas.
De la provincia de Misiones resultaron seleccionadas dos experiencias que se destacaron con sus presentaciones durante el segundo día del Congreso: una de ellas fue la Asociación de productores piscícolas Cuencas Unidas, con sede en Caraguatay, y la otra la Cooperativa Tambera Esperanza del municipio de Aurora.
El Agregado de Valor en Origen, como política estratégica de inclusión en los territorios
El Congreso contó con una impecable organización y sirvió para poner en debate, una vez más, el desafío de agregar valor en origen a la producción agropecuaria argentina. Cabe destacar que nuestro país tuvo una producción en la última campaña de 105,4 millones de toneladas de granos. Esto equivale a unos 2600 kilogramos anuales por habitante, lo que constituye un record mundial en cuanto a producción de granos per cápita.
El agregado de valor en origen significa generar empleo, conocimiento, y desarrollo en los territorios de las distintas regiones. En este sentido se manifestó Francisco Anglesio, vicepresidente de INTA, “agregar valor en origen debe ser el modelo agroindustrial argentino del siglo XXI, una síntesis de la colaboración virtuosa del sector rural y la industria, el Estado y la actividad privada”.
Asimismo, de acuerdo a Eliseo Monti, director nacional del INTA, agregar valor en origen es una apuesta no solo a la competitividad global de la producción nacional, sino también a la inclusión social en los territorios. “Cuando hablamos de valor agregado en origen, estamos hablando de más inclusión, más oportunidades para los jóvenes y más trabajo. Nuestros objetivos son expandir las fronteras del conocimiento, disminuir las brechas tecnológicas y promover la inserción de la pequeña producción en las cadenas agroalimentarias” expresó Monti.
En todo ello viene siendo fundamental la recuperación del rol del Estado en distintos planos de la vida social y económica del país en general y en sector agroalimentario en particular. En este sentido, de acuerdo a Carlos Casamiquela, presidente del INTA, “en la última década, la reorientación general de las políticas públicas creo un escenario favorable para avanzar en procesos que permiten convertir al país en un proveedor de productos agropecuarios de alta calidad”.
Por su parte Diego Ramilo, gerente del programa de extensión rural Profeder, señaló que lo importante “es la federalización de la política de agregado de valor en origen, lo que permite mantener un equilibrio entre los grandes, pequeños y medianos productores para que todos puedan participar de espacios como estos”. “El INTA toma la demanda y desafíos de los territorios. En este sentido, la comercialización es la tercera demanda más importante después del acceso al agua y la tenencia de la tierra”, agregó Ramilo.
Agregar Valor en Misiones. La producción de peces en el Alto Paraná
Una de las experiencias misioneras que más repercusión está teniendo a nivel nacional, en tanto modalidad emergente, es la producción de peces en estanques. Expresión de este crecimiento es la conformación de la Asociación Civil Cuencas Unidas, que tiene sede en Caraguatay y aglutina a 90 productores piscícolas.
Esta Asociación surgió en estos últimos años en el marco del fuerte crecimiento que la piscicultura está teniendo Misiones de la mano del impulso estatal tanto a través del financiamiento (con programas como el Proalimentos del Ministerio del Agro y la Producción) como del acompañamiento técnico en el que el INTA viene jugando un rol clave.
La piscicultura se presenta como una experiencia de agregado de valor en origen por excelencia en tanto permite la conversión de distintos productos primarios que se obtienen en la chacra en carne de pescado de excelente calidad nutricional. Como parte de este desarrollo en la actualidad ya está construido en un 70 por ciento un frigorífico que permitirá avanzar en la cadena y procesar de forma industrial la carne de pescado de todos estos productores pudiendo ganar mercados cada vez más grandes y exigentes.
A su vez, en el marco del crecimiento de esta actividad se destaca también la creación y puesta en funcionamiento de la Tecnicatura Superior en Pisicultura; la misma comenzó a dictarse a comienzos de este año en la EFA de Caraguatay, otorga títulos oficiales, tiene una duración de tres años y cuenta con una matrícula de treinta jóvenes que se están formando en este tipo de producción.
La producción de quesos en Colonia Aurora.
La otra experiencia misionera seleccionada fue la del grupo de productores lecheros de Colonia Aurora que formaron la Cooperativa Tambera Esperanza y comercializan sus quesos con la marca “Sol de Aurora”. Se trata de un grupo de pequeños productores familiares que en su mayoría se dedicaban hasta hace poco tiempo a la producción de tabaco.
Con fuerte impulso y acompañamiento del Estado a través de financiación y asistencia técnica, los productores lograron organizarse, primero como grupo informal y luego como una cooperativa agrícola. Gracias a ello se ha logrado la instalación de una industria láctea que, entre otras cosas, solucionó los problemas de comercialización, generó una mayor actividad económica en la zona empleando mano de obra calificada y capacitada, mejora los ingresos familiares rurales y aporta a la diversificación productiva en el territorio.
Esta experiencia cuenta con asistencia técnica del INTA de Santa Rita y con apoyo de la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación, el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y el Ministerio del Agro y la Producción de la Provincia.