En una visita girada ayer por el mandatario a la cooperativa de tabacaleros salteños, se dijo que la garantía gubernamental «evitará que los productores vendan por debajo de un piso mínimo» y permitirá a
El arrebato intervencionista del Gobernador de Salta -convencido de la libertad, pero no lo suficiente, según parece- ha sido presentado no obstante como una herramienta que «garantizará la equidad entre todos los actores del comercio».
Pero la cosa no ha quedado ahí. Urtubey prometió a los tabacaleros que «esta modalidad de trabajo» (el subsidio puro y duro) «se extenderá con este mismo criterio en los años siguientes permitiendo asegurar el desarrollo de una actividad de la que dependen en forma directa 25 mil familias».
Mayor capacidad de acopio
El Gobernador visitó ayer el nuevo predio de
El gobierno confía en que con su ayuda la cooperativa se convierta «en uno de los grandes actores del mercado tabacalero local». La meta es -dijo Urtubey- que Coprotab pueda adquirir el 100 por ciento de la producción local.
Cambio de ‘lógica’
Decidido, como siempre, a echarle un pulso a la lógica, el Gobernador dijo a los tabacaleros que pretende “cambiar una lógica según la cual se hacía más difícil la negociación para determinar los precios testigos del tabaco y una vez conseguido ese precio, frente a la aparición de otros mercados, los pequeños y medianos productores eran obligados a vender mal y no a los precios acordados”.
Según el mandatario, sus «decisiones estratégicas» (intervencionismo de manual) han permitido que producciones como la del pimiento gocen de la garantía oficial de un precio testigo. “Tomamos la decisión estratégica y estamos recorriendo la provincia garantizando las herramientas necesarias para que los pequeños productores sean más competitivos desde una lógica asociativa”.