7.06.13 La mayor parte de los países reportaron tasas de inflación mensual general y de alimentos menores a las registradas en marzo.
La inflación mensual de los alimentos de América Latina y el Caribe alcanzó 1,1% en abril, mientras que la inflación mensual general se ubicó en 0,6%. Ambos niveles son muy similares a los registrados en marzo pasado, señaló hoy la FAO.
Según el Informe Mensual de Precios de la FAO, la mayor parte de los países reportaron tasas de inflación mensual general y de alimentos menores a las registradas en marzo.
Dentro de los productos de mayor incidencia positiva en la inflación general de los países de la región se encontraron la carne de res, la cebolla y la naranja.
América del Sur
Mientras en Argentina y Brasil, las dos grandes economías de esta sub-región, las variaciones en ambos índices de precios –general y de alimentos– fueron prácticamente iguales a las de marzo, en Bolivia y Ecuador se registraron variaciones negativas en sus respectivos índices de precios de los alimentos entre marzo y abril.
La República Bolivariana de Venezuela mostró una variación al alza en su índice de inflación de los alimentos, y en Colombia, Paraguay, Perú y Uruguay, se observaron incrementos no mayores al 0,6%, tanto en la inflación mensual general como en la de alimentos.
América Central, México y el Caribe
Durante abril, los movimientos en la tasas de inflación de los países agrupados en América Central, México y el Caribe se caracterizaron por ser menores a las registradas el mes pasado y, en la mayoría de los casos, por estar por debajo del 1%.
En Guatemala, Haití y México, por ejemplo, la inflación mensual de los alimentos de abril no solo fue menor a las tasas de marzo, sino que llegaron a representar menos de dos tercios de sus niveles reportados el mes anterior.
Nicaragua y Panamá son los únicos casos en los que las tasas de inflación mensual de los alimentos fueron mayores a las del mes de marzo, aunque éstas tampoco superaron el 1%.
Vía libre a la exportación de langostinos a Brasil
El Ministerio de Agricultura confirmó que Brasil otorgó la habilitación formal para que la industria pesquera nacional pueda iniciar, a partir de este mes, la exportación de langostino fresco procesado y congelado en tierra al vecino país. Se podrían generar u$s 100 millones al año.
La comunicación oficial emitida por el Ministerio de Agricultura, Pecuaria y Abastecimiento de Brasil, que fue recibida a través de la embajada argentina en ese país, permitirá a partir de ahora la comercialización de langostino fresco procesado y congelado en tierra de la industria pesquera nacional.
A esos efectos, las empresas patagónicas Conarpesa, Pescapuerta, Bonasur y Altamare ya recibieron la documentación pertinente expedida por el Departamento de Inspección de Productos de Origen Animal (Dipoa), mientras que otras compañías del rubro como Iberpesca, Pesquera del Sur, Industria Pesquera Patagónica y Poseidón, recibirán los formularios habilitantes en los próximos días.
De esta forma, la cartera destacó que se inicia un promisorio ciclo de comercialización del crustáceo argentino a un mercado de gran trascendencia para el sector pesquero nacional, tanto en términos de volúmenes como de generación de divisas, las que podrían ascender a unos 100 millones de dólares al año.
“Nuestro langostino es un producto gourmet de calidad Premium que, al ser congelado en tierra, garantiza la mano de obra local en las plantas procesadoras y potencia el agregado de valor a través de procesos con altos estándares en términos de tecnología y sanidad", subrayó el ministro de Agricultura, Norberto Yauhar.
La apertura formal del mercado brasileño para la exportación de langostinos congelados en tierra -que beneficia a las compañías pesqueras patagónicas radicadas principalmente en la provincia de Chubut- es fruto de los convenios alcanzados durante la última cumbre del Mercosur realizada en Brasil, en diciembre pasado. En esa oportunidad, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y su par de Brasil, Dilma Rousseff, sentaron las bases de importantes acuerdos en materia agropecuaria.
“Los Estados ya cumplieron, ahora la evolución de la dinámica comercial será la que le impriman los empresarios privados", expresó Yauhar.