Delegados de los países que ratificaron el convenio marco de lucha contra el tabaco reconocieron que las alternativas al cultivo son difíciles de encontrar y que cualquier investigación deberá hacerse junto a los productores.
Como es habitual, a la reunión de la COP6 en Moscú (Rusia) asistieron casi únicamente delegados de los Ministerios de Salud, y un número reducido de gobiernos que también enviaron representantes de los Ministerios de Agricultura, Hacienda y de Comercio.
Jorge Kappaunn, presidente de la Cooperativa Agroindustrial de Misiones Ltda. (CTM) explico que “como es habitual se noto también, una enorme presión por parte de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG), contrarias al consumo del cigarrillo, pero lo aun más sorprendente es que una agencia de las Naciones Unidas, en una de sus asambleas más importantes, decidió expulsar al público y a la prensa de sus sesiones plenarias, incluyendo al presidente de la Asociación Mundial de productores de tabaco, entidad a la que estamos nucleados”
Desafortunadamente para ellos, afirmo Kappaunn, “el mensaje de nuestra entidad -ITGA- que expresó en decenas de reuniones que hemos hecho por todo el mundo en los últimos ocho años, ha llegado a muchos gobiernos y cierta racionalidad ha tocado muchas decisiones de la reunión de la COP” .
La reunión de Moscú
Los puntos más importantes en la agenda de los productores eran los relativos a la exclusión del tabaco de los acuerdos comerciales internacionales, las posibles nuevas medidas sobre los ingredientes permitidos en los cigarrillos y, en especial, las decisiones sobre alternativas al cultivo de tabaco (artículo 17) y al impacto ambiental del tabaco (artículo 18).
También hubo otras propuestas que pueden afectar, indirectamente, a los productores como la decisión que se tomó para sugerir a los Gobiernos un impuesto mínimo de 70 % sobre los productos de tabaco.
El tema de la exclusión del tabaco de los tratados internacionales de comercio fue muy debatido, pero, con posiciones muy fuertes y conflictivas por parte de gobiernos importantes, fue remitido para la COP7 para futuros debates.
El texto final tiene todavía un tono negativo general hacia el cultivo del tabaco y, entre otras cosas, propuestas inaceptables de que los gobiernos cesen todo apoyo financiero a los productores de tabaco y hacia una reforma agraria como un medio para que los productores de tabaco cambien hacia otros cultivos.
Todas las otras propuestas destinadas a obligar a los productores de tabaco a abandonar el tabaco fueron quitadas.
Los aspectos mas positivos de la reunión de Moscú las destacó el titular de la CTM, expresando que “el documento reconoce tres verdades esenciales:
“Las alternativas al cultivo de tabaco son difíciles de encontrar y requieren apoyo político, social y financiero complejo para crear las condiciones de mercado para que cualquier alternativa sea económicamente viable”
“La investigación de cualquier alternativa es un proceso a largo plazo que requiere una evaluación completa de las condiciones actuales de las regiones tabacaleras y las condiciones necesarias para cualquier éxito de diversificación”
“La definición de políticas y su aplicación no se puede hacer sin la participación de los propios productores “
“Estos son todos cambios positivos”, agrego Kappaunn, “comparando el comportamiento de las COPs anteriores y deben ser bienvenidos por los productores”.