Cemellia Sinesis es la planta de la que se extraen brotes y hojas para realizar infusiones.
Estas son las hojas más conocidas en el consumo de bebidas. A partir de las hojas se elabora variedad de tés; un brebaje versátil que refresca y aclimata dependiendo de la ocasión.
Al igual que el vino, a esta bebida se la puede catar para conocer profundamente sus cualidades. El proceso se denomina cata técnica, en el que se siguen varios pasos para evaluar desde la contextura hasta el color y el sabor del licor.
Guillermo Jarrín, sumiller de té y propietario de Tippy Tea, reconoce cuatro pasos principales dentro de una cata. El primero se refiere a la evaluación de la hoja en seco, el segundo al momento de infusión, el tercero se concentra en la evaluación de la hoja mojada y el cuarto se fija en la porción servida en la taza.
Para empezar se dispone de la hoja seca en montículos. Jarrín especifica que se debe valorar la granulometría, es decir que la hoja sea consistente y no esté mezclada con ningún otro elemento; puesto que la cata se realiza únicamente con el té puro. En este momento se deber revisar que los pedazos no se encuentren húmedos, ya que ello puede afectar la consistencia y el sabor final. ​
Una vez que se haya comprobado las primeras condiciones se procede a hacer la infusión con dos gramos de té por taza. Para este paso se deben tomar en cuenta dos escenarios: la temperatura y el tiempo de infusión, ambos elementos varían en la receta de cada hoja. Por ejemplo, el té verde requiere de una infusión de dos a tres minutos a una temperatura de entre 70 y 75°C, mientras que el té negro toma más tiempo de cocción, de tres a cuatro minutos a 85 y 90 °C.
Cuando el té ha alcanzado la temperatura adecuada, se separan las hebras y se las dispone para una evaluación. Aquí se da espacio para apreciar las hojas visual y olfativamente. Mientras permanecen calientes emanan olores que pueden ser florales, frutales, dulces o salados. En ese caso, la hoja del té verde suele expedir un olor vegetal. Jarrín explica que además se pueden ir anotando -en una ficha técnica- si existe alguna familiaridad con ciertos olores como por ejemplo una similitud con el olor a pasas.