Por quinto año consecutivo, el INYM llevó la yerba mate al principal centro de exposición y ventas de productos regionales de la Argentina. Lo hizo con un stand propio (donde el público pudo disfrutar mate cocido y conocer origen, proceso de elaboración y las propiedades benéficas que aporta la yerba a la salud) y respaldando la presencia (con la asignación de stands) de cinco empresas yerbateras y de la Ruta de la Yerba Mate.
Este año la feria (durante cuatro días) reunió a 80 mil visitantes, caracterizados por la diversidad (estudiantes, profesionales, empresas, grupos familiares), y a 400 productores de toda la Argentina (300 stands: vinos, lanas, quesos, embutidos, alpaca y plata, turismo, comida y vida sana, gastronomía…).
El masivo público agotó el stock de productos disponibles para la venta, como el de las yerbateras presentes con el INYM. “El segundo día, el viernes, ya habíamos vendido todo lo que teníamos y tuvimos que traer más”, contó Elida Kopruch, de la Cooperativa Yerbatera Andresito. El promedio de venta fue de 150 kilos por día. “También vendimos todos los termos, bombillas y mates. Y lo mejor de todo es que notamos que la gente empieza a conocer la marca.. la otra vez que habíamos venido no sabían sobre nosotros, y ahora se acercan a buscar nuestra yerba, la conocen”.
“La Obereña”, de la zona de centro de Misiones, celebró el éxito del evento. “Vendimos todo, la yerba convencional y la orgánica, los alfajores, los termos, mates, bombillas… la gente se llevó todo. En tres días vendimos lo mismo que durante toda la feria el año pasado”, dijo Mario Bárbaro. “El público busca la promociones, y mucha información, en nuestro caso quieren saber sobre la elaboración sin humo, y nuestro mejor día fue el feriado del viernes 9 de julio, cuando vendimos el doble”, agrego Patricio Lucero, de yerba mate Kraus.
La cooperativa Productores de Yerba Mate Santo Pipó ofreció mate al público y toda la variedad de productos que poseen. “Fue mucho mejor este año”, manifestó Johana Gagliardi, del área de Marketing, al comparar el movimiento comercial con el 2009. “Vendimos todos los productos, y recibimos a un público que busca mucha información, por ejemplo deseaban ver el color y saber el origen de la yerba. Y una de las cosas que nos asombró es que se llevaron muchísima yerba para tereré, los jóvenes, ahora en pleno invierno!”.
Otra de las cooperativas presentes fue la Agrícola Puerto Rico Limitada, con la marca Yemico. “Hemos vendido más de mil kilogramos”, señaló su integrante Antonio Reis. “Hemos notado, al igual que el año pasado, mucho interés por el producto natural y libre de humo”.
Además de las degustaciones y de la información al público con folletos, el INYM brindó dos charlas en el auditorio de Caminos y Sabores. Una sobre historia y cata de la yerba mate (a cargo de la sommelier Karla Johan Lorenzo) y otra sobre la yerba como fuente importante de polifenoles totales (a cargo del magister Luis Brumovski). Los presentes aprendieron que tradición y salud van de la mano: mientras que la sommelier enseñó el origen y cómo preparar la infusión para disfrutarla placenteramente, el magister reveló que los antioxidantes presentes en el producto mejoran las defensas naturales del organismo y lo protegen del daño celular.
Y por supuesto, hubieron más yerbateras en la Feria: Cooperativa Agrícola de Colonia Liebig, Cooperativa Agrícola de Ruíz de Montoya, y Cooperativa de Productores Yerbateros de Jardín América. Todos, con un balance positivo del evento.