El presidente de la Sociedad Rural Argentina, Hugo Biolcati, sostuvo ayer que las cuatro entidades agropecuarias que conforman la Mesa de Enlace van «camino a un nuevo cese de comercialización de granos», como el que se llevó a cabo hace quince días, por la falta de mercado y precio.Afirmó que «hay tensiones fuertes que trascienden y a veces dan la sensación de que se está al borde de la ruptura», pero aseguró que «no es así».
El presidente de la Sociedad Rural Argentina, Hugo Biolcati, sostuvo ayer que las cuatro entidades agropecuarias que conforman la Mesa de Enlace van «camino a un nuevo cese de comercialización de granos», como el que se llevó a cabo hace quince días, por la falta de mercado y precio.
Biolcati señaló que «luego de la presión ejercida con el paro de la semana anterior hay algunos indicios de alguna movilidad en los precios del mercado que podría estar indicando una tendencia hacia una modificación».
«Así que resolvimos observar el comportamiento de los precios una semana más», indicó el titular de la SRA, no obstante lo cual aseguró: «Creo que el camino es el cese de comercialización de nuevo».
Tras postergar cualquier medida de fuerza por trigo, como las propuestas por Carbap, la Mesa de Enlace optó por fijar un valor teórico de 981,9 pesos por tonelada del cereal en condiciones de cámara grado dos y aguardar una semana más para la toma de decisiones.
Diferentes miembros de la agrupación ruralista, incluidos dirigentes de la Federación Agraria Argentina, admitieron la posibilidad de que el gobierno, con su gestión ante los molinos, buscó la ruptura de la Mesa de Enlace al tramitar la compra de 500.000 toneladas de trigo a Agricultores Federados Argentinos, vinculada a la FAA.
Esto generó en la última semana fuertes cruces entre Biolcati y Mario Llambías, de Confederaciones Rurales, con su par Eduardo Buzzi, quien apoyó la intervención oficial en el mercado cerealero.
Buzzi no asistió al segundo encuentro programado por la Mesa de Enlace por encontrarse de vacaciones. Al respecto, Biolcati admitió que se generaron nuevos conflictos dentro del nucleamiento agropecuario que lograron atenuarse durante el segundo encuentro programado por la dirigencia del campo para analizar la situación triguera. «Hubo y hay tensiones internas sin duda» en la Mesa de Enlace, reconoció el titular de la Sociedad Rural, y remarcó que «no es la primera vez que esto ocurre».
«Somos cuatro entidades con orígenes, ideologías y actitudes distintas», señaló el titular de la Sociedad Rural, por lo cual puntualizó que «evidentemente hay momentos en que hay tensiones y nunca son suaves: las entidades tampoco son un colegio de señoritas».
Afirmó que «hay tensiones fuertes que trascienden y a veces dan la sensación de que se está al borde de la ruptura», pero aseguró que «no es así».
Desde el sector agropecuario, admitieron que en las últimas semanas sólo un diez por ciento de los productores lograron concretar ventas, muchas de ellas con operaciones pactadas a precio de futuro.
Frente a la imposibilidad de comercializar rápidamente la cosecha de trigo a precios cercanos al FAS Teórico, es decir a los 969 pesos por tonelada que indica el Ministerio de Agricultura, el sector podría adoptar en breve nuevas medidas de fuerza, alentadas por la Sociedad Rural y Confederaciones Rurales.
El presidente de la Sociedad Rural Argentina, Hugo Biolcati, sostuvo ayer que las cuatro entidades agropecuarias que conforman la Mesa de Enlace van «camino a un nuevo cese de comercialización de granos», como el que se llevó a cabo hace quince días, por la falta de mercado y precio.
Biolcati señaló que «luego de la presión ejercida con el paro de la semana anterior hay algunos indicios de alguna movilidad en los precios del mercado que podría estar indicando una tendencia hacia una modificación».
«Así que resolvimos observar el comportamiento de los precios una semana más», indicó el titular de la SRA, no obstante lo cual aseguró: «Creo que el camino es el cese de comercialización de nuevo».
Tras postergar cualquier medida de fuerza por trigo, como las propuestas por Carbap, la Mesa de Enlace optó por fijar un valor teórico de 981,9 pesos por tonelada del cereal en condiciones de cámara grado dos y aguardar una semana más para la toma de decisiones.
Diferentes miembros de la agrupación ruralista, incluidos dirigentes de la Federación Agraria Argentina, admitieron la posibilidad de que el gobierno, con su gestión ante los molinos, buscó la ruptura de la Mesa de Enlace al tramitar la compra de 500.000 toneladas de trigo a Agricultores Federados Argentinos, vinculada a la FAA.
Esto generó en la última semana fuertes cruces entre Biolcati y Mario Llambías, de Confederaciones Rurales, con su par Eduardo Buzzi, quien apoyó la intervención oficial en el mercado cerealero.
Buzzi no asistió al segundo encuentro programado por la Mesa de Enlace por encontrarse de vacaciones. Al respecto, Biolcati admitió que se generaron nuevos conflictos dentro del nucleamiento agropecuario que lograron atenuarse durante el segundo encuentro programado por la dirigencia del campo para analizar la situación triguera. «Hubo y hay tensiones internas sin duda» en la Mesa de Enlace, reconoció el titular de la Sociedad Rural, y remarcó que «no es la primera vez que esto ocurre».
«Somos cuatro entidades con orígenes, ideologías y actitudes distintas», señaló el titular de la Sociedad Rural, por lo cual puntualizó que «evidentemente hay momentos en que hay tensiones y nunca son suaves: las entidades tampoco son un colegio de señoritas».
Afirmó que «hay tensiones fuertes que trascienden y a veces dan la sensación de que se está al borde de la ruptura», pero aseguró que «no es así».
Desde el sector agropecuario, admitieron que en las últimas semanas sólo un diez por ciento de los productores lograron concretar ventas, muchas de ellas con operaciones pactadas a precio de futuro.
Frente a la imposibilidad de comercializar rápidamente la cosecha de trigo a precios cercanos al FAS Teórico, es decir a los 969 pesos por tonelada que indica el Ministerio de Agricultura, el sector podría adoptar en breve nuevas medidas de fuerza, alentadas por la Sociedad Rural y Confederaciones Rurales.