‘Finalizada la cosecha de trigo, la producción lograda ascendió a 7,44 millones de toneladas, partiendo de una superficie cultivada, ajustada ahora en 3,08 millones de hectáreas‘, consignó el PAS.
El clima adverso en numerosas zonas trigueras impactó en muchos lotes que fueron abandonados por la escasa productividad unitaria que perfilaban.
En consecuencia se estima que a nivel nacional un 10,4 por ciento del área implantada de trigo no fue cosechada con destino a grano sino que se utilizó como verdeo o para alimentar animales.
‘Los magros rendimientos logrados en las provincias norteñas, en Córdoba, La Pampa y en el sudoeste de Buenos Aires, fueron compensados parcialmente con mejores valores en Entre Ríos, Sur de Santa Fe, Norte, centro, este y sudeste de Buenos Aires.
Respecto de la soja, ‘al presente informe, el avance nacional de siembra alcanzó a cubrir un 99,3 por ciento de las 19 millones de hectáreas aún proyectadas para la campaña en curso‘.
En números absolutos, a la fecha se habrían sembrado más de 18.8 millones de hectáreas lo que marca un adelanto ‘interanual‘ de 3,1 puntos porcentuales y un progreso ‘intersemanal‘ de 0,8 por ciento.
‘Restarían aún incorporar cuadros anegados sobre el Núcleo Sur y Sur de Córdoba, como así también hacia el Centro-Norte de Santa Fe‘, destacó el PAS.
No obstante, informes climáticos prevén una generalizada ausencia de precipitaciones hacia las próximas semanas que de cumplirse permitiría la incorporación de las parcelas retrasadas por excesos hídricos en las distintas regiones.
Por otra parte, se espera que el ingreso de vientos provenientes del sector norte provoque una fuerte ola de calor que afectará a la mayor parte del área agrícola nacional, que alcanzará su mayor intensidad sobre el centro y el sur.
De esta forma, cuadros que evolucionan en ajustada condiciones hídricas en periferia a Tres Arroyos, sectores del sudoeste de Buenos Aires y Centro-Norte de Córdoba podrían ver afectado su potencial productivo.
‘Seguidamente, la combinación de elevadas temperaturas y ambientes húmedos podría incrementar la incidencia de enfermedades fúngicas en parcelas con excesos hídricos‘, destacaron los técnicos.
Con relación al estado de los cultivos, ‘si bien a la fecha existen siembras tempranas situadas sobre la franja central transitan estadios reproductivos avanzados en óptimas condiciones mientras que simultáneamente los cuadros de segunda inician floración‘, consignaron.