Varios estudios previos habían asociado la ingesta de este infusión con bajos niveles de estrés psicológico. Eso hizo que el equipo estudiara las relaciones entre el consumo de té verde y los síntomas de depresión en 1.058 adultos mayores relativamente saludables.
El 34 por ciento de los hombres y el 39 por ciento de las mujeres tenía los síntomas, publicó American Journal of Clinical Nutrition. Eran graves en el 20 por ciento de los hombres y el 24 por ciento de las mujeres.
En general, 488 participantes dijeron que bebían cuatro o más tazas de té verde por día, 284 dijeron que consumían tres tazas diarias y los 286 restantes, una o menos.
Según los autores, el efecto protector aparente contra los síntomas de depresión que tendría el alto consumo de la infusión no desapareció tras considerar el nivel socioeconómico, el género, la alimentación, la historia clínica, el uso de antidepresivos, el tabaquismo y la actividad física de los participantes.
En cambio, no hubo relación entre el consumo de té negro, té Oolong o café con la reducción de los síntomas.
Un componente del té verde, el aminoácido teanina, que actúa como tranquilizante en el cerebro, explicaría «el efecto potencialmente beneficioso» registrado en el estudio, dijo Niu a Reuters Health.
De todos modos, se necesitan más estudios para confirmar si el aumento del consumo de té verde tiene efectos antidepresivos. Por ello tanto, Niu no recomendó usarlo para reducir la depresión en los adultos mayores.
Por Joene Hendry
American Journal of Clinical Nutrition,