En el sur de Buenos Aires, técnicos del INTA ponen a prueba un sistema de riego por goteo que funciona con energía solar. Esta herramienta permite alcanzar una eficiencia en el uso del agua del 90 por ciento y fue uno de los proyectos presentados en CREAlab.
Presente en la mayoría de las comidas, la cebolla ocupa un lugar destacado en la producción hortícola de la Argentina. De hecho, en el valle bonaerense del río Colorado su cultivo se desarrolla sobre una superficie de 13.000 hectáreas, lo que la ubica entre las principales provincias productoras. En este sentido, el riego por goteo con energía solar representa un complemento fundamental en los emprendimientos familiares. Este fue uno de los proyectos presentados en CREAlab.
Juan Pablo D’Amico, especialista del INTA Hilario Ascasubi –Buenos Aires–, señaló que “en el valle bonaerense del río Colorado, el aprovechamiento de los recursos naturales disponibles, como el agua y la radiación solar, es estratégico”.
En esta zona productiva, donde el riego es imprescindible para llevar adelante los cultivos, tanto el agua como la energía eléctrica son recursos limitantes por lo que la respuesta está en el uso eficiente de ambos recursos.
Con una superficie cultivada cercana a las 13.000 hectáreas, la cebolla es una de las principales actividades productivas de la región. “Es una hortaliza que, en los meses de diciembre y enero, demanda mucha agua”, aseguró D´Amico y agregó: “En el 98 % de la superficie regada, se utiliza el sistema gravitacional realizado por surco, melga o tablón; con niveles de pérdida en la eficiencia de hasta el 50 %”.
“Muchas veces la única manera de aumentar la superficie cultivada y los rendimientos es tecnificando el riego mediante sistemas presurizados como riego por goteo o micro aspersión”, indicó D´Amico quien reflexionó: “Para implementarlo es necesario contar con acceso a la energía que, además de ser un recurso escaso, representa un costo elevado”.
“La energía solar fotovoltaica es un recurso limpio, renovable y disponible que puede ser aprovechado en sistemas destinados al bombeo de agua para riego”, expresó Marcos Hall, director del Instituto de Investigación y Desarrollo Tecnológico para la Agricultura Familiar (IPAF) Región Pampeana, quien aseguró que “ambos recursos tienen un rol estratégico para el desarrollo”.
De acuerdo con el atlas solar, desarrollado por la NASA, el valle bonaerense del río Colorado cuenta con una adecuada disponibilidad de radicación solar.
En este sentido, Hall afirmó que “el desarrollo de equipos que funcionen con energía renovable representa un gran paso para mejorar la calidad de vida, la salud y la seguridad alimentaria de los agricultores”.
Por esto, “desde el IPAF estamos en la búsqueda permanente de herramientas que sirvan para asegurar a los agricultores el acceso a las fuentes alternativas de energía”, indicó Hall.
Fernando Ocampo, investigador del IPAF Región Pampeana, señaló que “la adopción de técnicas de riego muchas veces dependen de la disponibilidad de energía, o el acceso que pueda tener el productor, en un lugar determinado”.
Por esto, “estamos probando un sistema de riego por goteo que funciona con energía solar”, expresó Ocampo quien analizó: “Se trata de una herramienta que, además, permitirá alcanzar una eficiencia del 90 % en el uso del agua”.
Fuente: Inta