5.6.18No sólo la adopción de la siembra directa en este país es uno de los principales logros del INTA a través de todo su know how, sino que también posibilitó abrir un importante mercado para la maquinaria agrícola argentina.
“En 10 años se vendieron más de 180 sembradoras, 160 embolsadoras, más de 100 cabezales maiceros y 150 girasoleros, e igual cantidad de tolvas, gran cantidad de semillas e inoculantes y un buen resultado de penetración para las agropartes argentinas que se pueden ver en muchas máquinas sudafricanas”, destacó el ingeniero Mario Bragachini, especialista en maquinaria agrícola del INTA Manfredi y miembro del comité de técnicos que participaron una vez más de la feria Nampo Harvest Day 2018 desarrollada durante mayo en Sudáfrica, donde la delegación argentina pudo realizar además una jornada a campo para mostrar la tecnología de la siembra directa y la maquinaria nacional.
La Nampo Harvest Day es la exposición agropecuaria y agroindustrial a cielo abierto más importante de África Subsahariana, se realiza en la ciudad Bothaville en el centro del país, reúne a 500 expositores en una infraestructura de más de 50 años instalada en el medio del campo en Sudáfrica. Gracias al acuerdo interinstitucional, desde hace algunos Argentina participa con un pabellón institucional en donde muestra maquinaria y contenido técnico relacionado a la producción agropecuaria y la siembra directa.
El Ing. Agr. Juan Pablo Velez, técnico del INTA Manfredi que también participó en la misión, puntualizó que “se concretaron 3 convenios consecutivos de 8 años (2010 al 2018) con la cooperativa organizadora de la expo Nampo, Grain South África – denominada Grain S.A.-, y una cooperativa de productores para realizar ensayos comparativos en campos experimentales en Sudáfrica entre los sistemas de siembra directa versus sistema tradicional de producción con labranza”. Con estos ensayos “se logró demostrar que el paquete tecnológico argentino incrementaba un 30% el rendimiento de maíz y un 15% de la soja, con un 24.5% de reducción de costo”, sumado al cuidado del suelo y del agua, explicó.
Además de la venta de maquinaria agrícola argentina en este país producto de los avances tecnológicos que el INTA pudo desarrollar a lo largo de estos últimos años, a raíz de estas actividades técnicas se pudo también acercar otro tipo de empresas vinculadas al sector. “Muchos insumos como semillas e inoculantes de empresas argentinas fueron ganando espacio de mercado también, como plantas de silos, secadoras, plantas de prensado-extrusado de soja y de productos balanceados”, comentó el Ing. Agr. Carlos Galarza, especialista de INTA Marcos Juárez.
El Farmers Day, un día de campo africano pero con maquinaria argentina
En el marco del mismo objetivo de internacionalización de la maquinaria agrícola argentina, el 22 de mayo se realizó por segundo año consecutivo la 2ª Jornada a Campo de Siembra Directa Argentina en Sudáfrica, que denominaron localmente como Farmers Day. Se llevó a cabo durante todo el día en el campo de Vilhelm Erichsen, productor sudafricano, visionario y precursor en la adopción de Siembra Directa en una de las zonas más productivas de Sudáfrica, Middelburg.
Erichsen fue el primero en hablar del sistema productivo argentino, aprovechando para alentar a los 70 productores presentes a iniciarse en la siembra directa enfocándose en lo beneficios ecológicos y económicos y a una apuesta para dejar a las próximas generaciones suelos productivos y no erosionados, problema que hace evidente en los lotes en los que se producen de manera tradicional, en los que remueven con púas subsoladoras de hasta 1,5 metros y posteriormente mueven el suelo utilizando implementos de profundidad y tractores de potencia extrema.
El discurso del productor sudafricano se refuerza con la realidad que se puede ver en su campo demostrador, que evidencia la importancia de la evolución en el manejo hacia una mayor captura de radiación solar y agua en el suelo. Vilhelm destaca que no es un proceso rápido, que se debe “hacer un cambio en la manera de pensar y que la siembra directa definitivamente mejora la calidad de suelo y lo preserva”. Y remata Erichsen: “Una vez que se comienza se debe creer en el sistema y mantenerse, aunque lo resultados en un principio no sean muy diferentes, lo revolucionario viene después”.
En su presentación Erichsen explicó que por medio del manejo de control de malezas en soja, elección de variedades, fertilización, encalado, calidad de siembra, logró reducir el impacto de la Sclerotinia, pasando de obtener soja de 2.2 t/ha a 4.2 t/ha, ambos rendimientos fueron acompañados por maíces de 9,5 t/ha, lo que deja en evidencia de que la mejora en rendimiento en soja fue por manejo, con un importante respaldo por parte del INTA con asistencia in situ y soporte a distancia de sus técnicos.
El productor mencionó también el ahorro medido en KW/ha. Logró cuantificar cerca del 58% de ahorro en potencia utilizada al pasar de labranza convencional a siembra directa, con un impacto directo en la rentabilidad de la producción. Y finalmente invitó a todos “los que se quieran mantener en la actividad agrícola a adoptar la siembra directa ya que de eso dependerá permanecer en la actividad”.
La siembra directa argentina está siendo ampliamente aceptada y con gran crecimiento en adopción por los productores sudafricanos. La fidelización de la maquinaria argentina para siembra directa mediante este tipo de capacitaciones e intervenciones en grandes eventos agropecuarios, posicionan a la mecanización argentina frente a los países competidores que solo quieren imponer sus maquinarias.
Los productores sudafricanos ven a nuestro país como socio con voluntad de producir un cambio ecológico y social cuyo beneficio principal es la sustentabilidad y productividad del campo sudafricano. Ven en Argentina un país con trayectoria respaldada por la implementación exitosa de la Siembra Directa en casi toda la superficie cultivable. Los productores sudafricanos que adoptaron la siembra directa argentina hace ya 4 años están requiriendo del INTA temas como agricultura de precisión, manejo por ambientes de densidad de maíz, velocidad de siembra con uniformidad de distribución y uniformidad de profundidad de semilla, control selectivo de malezas, manejo de información con imágenes satelitales y rotación de cultivos con cultivos de servicios, genética con resistencia a enfermedades e insectos, espaciamiento entre hileras en soja y maíz, fertilización balanceada, barredores de rastrojos y control de profundidad inteligente. Pero la brecha es muy grande entre los productores adoptantes y el resto, la superficie cubierta con siembra directa está en un 5 a 20 % según la zona, pero a nivel nacional los grandes vendedores de tractores incentivan la labranza e intentan frenar un proceso de adopción de siembra directa que es irreversible.
Fuente: Todo agro