En la víspera, representantes de las entidades del agro mantuvieron una reunión en la AFIP con su titular, Ricardo Echegaray. Durante el encuentro, el vicepresidente segundo de Federación Agraria Argentina (FAA) Julio Currás manifestó su preocupación y fue respaldado por el director de la Sociedad Rural, Daniel Pelegrina y otros referentes de la Mesa de Enlace.
«El día de la cosecha no se puede perder tiempo por eso planteamos volver a la metodología anterior que consistía en tener un remito en el campo para llevar al acopio», relató.
En cambio «ahora se requiere de tecnología que no todos los productores disponen tiempo para obtener el documento y además no está claro si es seguro ya que se conocen casos de números adulterados», explicaron los ruralistas en la víspera.
En el encuentro los representantes de las entidades transmitieron sus objeciones al Código de Trazabilidad de Granos (CTG) y extra oficialmente pudieron saber que el Gobierno analizaría modificaciones.
El CTG es necesario para que los productores obtengan las cartas de porte que necesitan para transportar los granos de manera gratuita, pero que en los últimos tiempos presenta «dificultades burocráticas».
«Les expresamos las dificultades que tiene el productor para poder cumplir con este sistema, ya que la realidad marca que en las zonas rurales el servicio de banda ancha y la telefonía celular funcionan deficientemente», resaltó Curras.
La actual carta de porte debe ser gestionada por Internet o SMS: «lo cual no es fácil de hacer debido a las carencias técnicas del servicio en el interior del país», señaló. Si bien «hay voluntad del productor en cumplir», éste «no tiene los medios necesarios para lograrlo».
Las críticas al sistema se suceden desde marzo cuando el Gobierno dejó de lado el método anterior por el cual el productor compraba el documento de carácter único e inviolable a puntos de ventas de FAA y en centros de acopiadores.
En este sentido, el vicepresidente 2do de FAA sostuvo: «nosotros reclamamos la vuelta del sistema anterior de cartas de porte porque entendemos que era el más eficaz y el más transparente», pero «no pedimos la comercialización». «El sistema actual, habiendo tenido una cosecha regular, tirando a mala, colapsó totalmente», añadió. Para Currás, «esta metodología generará un caos total.
Tengamos en cuenta que sólo un 40 o 50 por ciento tiene la tecnología necesaria para llevar a cabo el trámite para solicitar la carta de porte». No nos podemos dar el lujo como país de perder otra oportunidad por una burocracia inútil».
Los operadores tienen hasta el 20 de noviembre para regularizar las cartas de porte, pero entre Echegaray y los representantes de las entidades agropecuarias quedó pendiente una futura reunión.
Fuente: Primicias Rurales