El miércoles 11 la CoTTaProM presentará un plan para mejorar la productividad que incluye el adelantamiento en un mes de la zafra 2016/7
Los fenómenos climáticos de la corriente del niño han profundizado un problema que se viene observando en los últimos años en el sector tabacalero de Misiones. Según algunas estimaciones el promedio alcanzaría apenas a los 1.000 kilogramos por hectárea en la pasada cosecha, contra los 1.500 de promedio histórico
Las pérdidas de la última cosecha, pusieron una nueva alerta en el sector.
Desde la Comisión Técnica del Tabaco de la Provincia de Misiones, (CoTTaProM), se elaboró un plan que será presentado oficialmente el venidero 11 de mayo a todas las entidades del sector.
El programa presenta diversas aristas, desde algunas netamente agronómicas hasta otras que comprenden cuestiones de organización del sector, la medida inmediata es el adelantamiento de la siembra y su concentración en el mes de mayo, esto correría todo el cronograma de actividades aproximadamente un mes.
Urbieta: “es indispensable reordenar el esquema productivo”
El presidente de la CoTTaProM, René Urbieta dijo que más allá de las cuestiones agronómicas se deben tomar diversas medidas que aseguren la sustentabilidad del sector.
En este sentido aseguró que “se debe trabajar en la modificación del esquema tributario a los efectos que el productor sepa que podrá vender toda su producción. Hoy con los límites tan bajos los productores ven acotada la cantidad de tabaco que pueden vender para no perder beneficios sociales y esta situación lleva a que muchos productores, a pesar de tener infraestructura y condiciones para una cosecha mayor, apenas produzcan para no salirse del esquema de monotributo social. Vale aclarar que al comienzo del acopio cada monotributista social podía vender solamente 1900 kilogramos.
“Es necesario que el monotributo tenga una actualización automática y de manera permanente, le brindará previsibilidad al productor” agregó. “Otra posibilidad que debe estudiarse es reformular el esquema tributario para los tabacaleros de manera que puedan desarrollar todo su potencial productivo sin perder alguno de los beneficios sociales que vienen percibiendo”.
También puso énfasis en que se establezca un piso de producción para poder acceder a la obra social puesto que es un gran atractivo para el productor “hoy con un kilaje mínimo, a veces irrisorio, se logra el beneficio; colocando un piso de producción, la medida sola se transformará en un ordenador”
Otras de las medidas que se reclama desde los cuadros técnicos, es la referida a la fecha de inicio del acopio, en este aspecto, Urbieta expresó que “es indispensable comenzar el acopio en los primeros días de febrero, no solamente por la anticipación del cronograma lo cual permitiría una descongestión en los turnos de venta y la planificación de la próxima campaña, sino también porque se estará cuidando los ingresos del productor que a medida que pasan los días ve como su tabaco pierde peso y calidad mientras permanece colgado en los galpones”.
Estudios realizados, indican que cada treinta días el tabaco colgado en los galpones perdería un diez por ciento de peso, además de la pérdida de calidad. Son dos resultantes que luego se comprueba en la boca de acopio.
El nuevo cronograma de la actividad tabacalera
El programa propuesto, y que será presentado el venidero 11 de mayo a los representantes de todas las entidades del sector, contempla la siembra en el mes de mayo, de manera de concentrar las plantaciones en el mes de Agosto para que con las distintas tareas culturales se llegue a tener gran parte de la cosecha antes del 15-20 de Diciembre y finalmente comenzar con el acopio en Febrero.
Practicas agronómicas
Lograr mayores rindes no será solamente a partir de la reprogramación de la actividad. La entidad técnica del sector ha preparado una serie de recomendaciones en búsqueda de elevar la productividad y superar los 1500 kilogramos por hectárea.
– El informe técnico señala la necesidad y califica de indispensable la preparación adecuada del suelo, desmalezado, suelto y aireado, a los efectos de un buen “arraigo” de la planta.
– Respecto al uso de los fertilizantes las distintas empresas están manejando nuevas formulaciones de manera de ofrecer al productor productos mas concentrados y poder alcanzar las 140-150 unidades de nitrógeno por hectárea.
– En cuanto al “despunte”, tarea que se realizará en el mes de noviembre también se observarán modificaciones. Con los nuevos híbridos, el despunte se realizará a un promedio de 18 hojas.
– Finalmente, la cuestión de los galpones que también estema de preocupación. Se insistirá a los productores para que además de ser adecuados, deben contar con espacio suficiente para la producción estimada. El “amontonamiento” de tabaco produce daños en el producto.
Cabe destacar que según se anticipa, el fenómeno del niño estará terminando, aunque sería un año de transición con lluvias aún mayores a los niveles normales.
Si bien no se conocen aún los volúmenes de la producción tabacalera se estima que podrían ser superiores a lo de años anteriores. Con las modificaciones en el calendario y las nuevas prácticas se espera elevar considerablemente los ingresos de los productores.
CTM comienza la entrega de insumos
Atento a los cambios que se avecinan en el calendario tabacalero, desde la CTM anticiparon que ya cuentan con todo el paquete de insumos para los productores.
El Departamento de Insumos de la cooperativa ya se encuentra distribuyendo semillas, sustrato, bandejas para la siembra, plásticos para las piletas, entre otros.
Según los técnicos de la entidad, se sucedieron varias reuniones con productores a los que se les informo de las nuevas prácticas, quiénes coincidieron en la necesidad de las modificaciones y manifestaron su compromiso con la nueva campaña.
Por último es importante señalar el éxito de la última campaña en la eliminación de los residuos no permitidos en el tabaco. El trabajo conjunto, empresas, cooperativas, entidades de los productores y el gobierno provincial permitió bajar de manera considerable los índices preocupantes que se habían observado en la zafra anterior.