La modalidad permitió un aumento en la calidad de los plantines obtenidos.
Beneficios:
· Uniformidad,
· Mejor cuidado y manejo
· Aplicaciones controladas de fertilizantes y agentes protectores de cultivos
· Mayor efectividad y control en la cantidad de semillas a ser sembradas.
· Mejora de la calidad de vida de los productores tabacaleros, haciendo más eficiente el uso del agua y dándole mayor disponibilidad de tiempo para otras tareas, como por ejemplo trabajar en la huerta familiar.
Mediante el protocolo de Montreal (1987) y revisiones posteriores se observa el compromiso de la comunidad internacional en la reducción y eliminación escalonada del bromuro de metilo para la protección de la capa de ozono. Por medio de un esfuerzo conjunto del sector tabacalero, se logró el abandono de esta práctica en el cultivo del Burley misionero.
El 1° de enero de
De esta manera Misiones se transformó en la primera provincia libre de bromuro de metilo del país, el cual era masivamente utilizado en la producción de plantines de forma convencional.