“Acá trabajamos en el Parque y en la zonas cercanas, pero también donde haya remanentes de selva Paranaense, como las que tienen las empresas locales dentro de sus predios. Una de ellas denunció ante Ecología que tenían registros de caza furtiva en su propiedad y solicitaron nuestra presencia para controlar y evitar los actos de caza”, explicó el guardaparque Jorge Bondar.
En ese contexto, organizaron con la empresa el sistema de patrullas y dentro de esos operativos, sorprendieron a los cazadores. “Escuchamos una corrida de perros, la detonación de un arma y salimos a buscar a los cazadores. Encontramos dos personas con armas, una de las cuales se dio a la fuga”, agregó el guardaparque.
En el operativo, secuestraron una escopeta calibre 28, de un caño, con cuatro cartuchos para ese calibre y una pieza de la cacería: una liebre nativa. Los funcionarios de Ecología hicieron las actuaciones de rigor y además, los elementos utilizados para la incursión de caza de una persona que se constató que era lugareño.
Si bien el cuidado del Parque Provincial Teyú Cuaré es prioritario para los guardaparques del área, cuentan con un proyecto de control que incluye a los montes cercanos del área urbana. “Nos pidieron apoyo porque hay caza furtiva en las propiedades con monte de la zona y ellos tienen el compromiso de cuidar la flora y la fauna y de respetar las normas ambientales, así que en ese contexto prestamos nuestro servicio. Nos ocupamos de controlar los remanentes de monte que todos tenemos el compromiso de conservar”, dijo el guardaparque.