Un proyecto llevado a cabo por cuatro instituciones productivas busca optimizar aún más la producción de arroz en Corrientes mediante la cría de peces en períodos de “descanso” de los campos.
Una iniciativa tecnológica que está siendo validada podría optimizar aún más la producción de arroz en Corrientes. Esto no es poco si se tiene en cuenta de que se trata de la provincia líder a nivel nacional en el cultivo de este cereal, tanto en producción como en área de siembra.
Concretamente se está trabajando en un esquema de producción que transforma el campo arrocero en un terreno mixto, que a partir de ciertas adecuaciones se lo utiliza también para sembrar peces en los períodos de descanso entre cosecha y siembra de arroz. De esta manera el campo no se mantiene improductivo y gira hacia una actividad como la pisicultura, con un rinde estimado de 2.000 kilogramos de peces por ha por año.
Este estudio piloto es llevado adelante en Corrientes con financiamiento del Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (Prosap). En su ejecución intervienen cuatro instituciones: el Ministerio de Producción de la provincia, la Asociación Correntina de Plantadores de Arroz, la Estación Experimental Inta Corrientes y la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Unne.
Las expectativas están enfocadas en complementar las dos producciones y lograr una valoración en lo productivo y económico, en especial de los productos que se obtengan de estos ciclos. Este seguimiento técnico minucioso busca, entre otros aspectos, descartar o reducir los agroquímicos (defensivos agrícolas) que usualmente se utilizan en la producción arrocera.
Así lo explicó el Director Ejecutivo del Proyecto, Juan Pablo Roux. “Si en los análisis que realizamos en los distintos ciclos de crecimiento de los peces y del arroz, no son detectables rastros de pesticidas, se buscará a futuro la certificación de lo que se denomina arroz orgánico”. Este rótulo lo hace libre de agroquímicos, aumenta su calidad y por ende le otorga un precio diferenciado.
El terreno
Ante la pregunta si todos los campos en donde se produce arroz pueden rotar hacia la piscicultura, la respuesta es positiva. No obstante, requieren de una adecuación previa y una evaluación a cargo de técnicos que deciden sobre las dimensiones del lote a utilizar en función a la topografía del terreno y las condiciones climáticas de la zona.
La adecuación consiste en elevar los bordes del terreno para obtener un gran espejo de agua. Se fabrican además unos “refugios” en los bordes interiores de esos levantamientos, que son utilizados por los peces en temporadas de bajas temperaturas.
Estos refugios tienen una pared en 45 grados que evitan la erosión y posterior desmoronamiento por el golpeteo del agua. Las dimensiones de los lotes son variables. Los terrenos experimentales de este proyecto tienen 4 ha, pero ya existen emprendimientos con extensiones de 60 a 100 ha, en Las Palmas (provincia del Chaco).
Proceso
El ciclo rotativo se desarrolla de la siguiente manera. Una vez finalizada la cosecha de arroz y con el lote ya adecuado previamente, se lo llena de agua al límite máximo de tal forma que queden los refugios y el rastrojo de arroz totalmente cubiertos, y allí se siembran los peces.
Los ejemplares estarán en ese gran espejo de agua por un lapso de 2 años, alimentándose del rastrojo y de todo elemento orgánico resultante de la cosecha. Como parte del proceso de crecimiento, también se lo complementa con raciones de alimento balanceado.
Al transcurrir los dos años se retira el agua del lote, quedando totalmente despejada la superficie donde se sembrará el arroz y los peces quedarán flotando en los refugios, que en esta instancia se asemejan a zanjas cubiertas con agua bordeando el terreno. Los peces son cosechados con redes de los refugios.
La ventaja de tener el terreno inundado por el lapso de 2 años es que las plagas vegetales se descomponen y sirven de alimentos para los peces. En consecuencia, los trabajos de preparación del lote para la siembra del arroz se reducen considerablemente. Tampoco requiere de nutrientes ni fertilizantes, ya que toda la materia orgánica del desecho de los peces queda depositada en el suelo y es óptima para el desarrollo de la planta de arroz.
El arroz que se utiliza para sembrar en ese ciclo se llama arroz pre germinado, porque es una semilla con raíz y las dos primeras hojas. Se siembra con un sistema aéreo o con equipamiento especial, porque el método de siembra tradicional ya no es utilizado.