«El mundo está ingresando en el cuarto trimestre del año en un marco de optimismo hacia el futuro, no exento de volatilidad en el presente, en el que las economías desarrolladas comienzan a mostrar señales de recuperación en su actividad, aunque todavía muy lejos de los picos alcanzados en el primer semestre de 2007», sostiene la entidad.
En ese contexto, Argentina se ve beneficiada por `una suerte de brisa de popa` que podría generar «un marco más favorable para la actividad económica doméstica en
Para el IAEF, en el segundo trimestre del año en el país se comenzó a «advertir algunas señales favorables» en términos de actividad económica, como el incipiente aumento de la producción industrial.
«En la profundización de esas señales en lo que resta del año, radicaría la posibilidad de revertir el deterioro fiscal, visto el bajo crecimiento de la recaudación fiscal, que en agosto aumentó sólo un 4,2 por ciento en términos interanuales», destaca el informe.
Fuente: TELAM