En lo que va del año, esta firma ya envió el segundo contenedor de yerba mate por valor de 20.000 dólares que llegó a Atlanta recientemente con
En el mercado norteamericano el kilo de yerba se comercializa entre 4.5 y 9 dólares. Los productos exportados por esta firma son almacenados en un depósito situado en Cartersville, Georgia y de ahí distribuyen y venden por correo, en todo Estados Unidos e incluso en otras regiones del mundo, como Hong Kong, Australia y España, desde donde recibieron pedidos.
Hace dos años, Itapúa Trading hizo una alianza con el empresario norteamericano Rick Wiman, que llevaba diez años importando yerba mate de Paraguay, Argentina y Brasil. “Si bien los que más compran yerba en Estados Unidos son argentinos, paraguayos, uruguayos y brasileños, poco a poco los norteamericanos van consumiendo el producto en variadas formas, desde infusiones hasta con el mate y la bombilla, como se usa en Sudamérica. Lo que falta es mayor difusión”, indicó Wiman a su turno.
“En nuestros portales en Internet tenemos páginas en donde explicamos cómo es el producto, de dónde viene, sus beneficios y cualidades y cómo se toma. Debe haber un proceso de educación para quienes no conocen la yerba”, explicó a su vez Monges.
La firma vende solo a través de la página web y registra un promedio de 600 órdenes por mes. “La yerba mate paraguaya tiene un futuro promisorio, porque la gente busca lo natural, orgánico, algo bien hecho artesanalmente. Nuestras industrias yerbateras responden a esos requisitos”, aseguró.
Wiman apunta a que el producto paraguayo lleva las de ganar en el mercado estadounidense y que solo falta mayor promoción.
La yerba paraguaya es la única que se estaciona entre 18 y 24 meses y la producción se esmera en que el producto sea bueno. La yerba argentina pone esmero en que la producción salga lo más rápido posible, acelerando los procesos de estacionamiento.
Monges exporta productos paraguayos y accesorios como termos, guampas y bombillas, mientras que Wiman importa de nuestro país la materia prima a granel y envasa en Estados Unidos, siguiendo el gusto de los consumidores que no son latinos.
Fuente: ABC color