La importación de determinadas partes de las aves, como por ejemplo los cuartos traseros y los muslos que se importante de EE.UU., evita que la producción nacional pueda incrementarse, según Crivelli. Desde el país norteamericano Argentina importa aproximadamente el 10% del total de la carne que consume.
Fruto de ese estancamiento, la producción avícola argentina está cercana a los 2,9 millones de t durante casi los últimos 20 años, pese a que durante 2009 se registró una ligera disminución.
Fuente: eurocarnedigital