Representantes de la Red Trinacional de Restauración del Bosque Atlántico, de la que forma parte la Fundación Vida Silvestre Argentina, el Pacto pela Mata Atlántica de Brasil y actores clave de los distintos sectores que actúan en el paisaje de la ecorregión del Bosque Atlántico del Alto Paraná participaron del Encuentro de Diálogo de Restauración del Paisaje de la Ecorregión del Alto Paraná que se realizó en Foz de Iguaçú, Brasil. Durante las jornadas, que se extendieron del 29 al 31 de julio, los participantes analizaron los avances y desafíos de la restauración en la región, identificando las acciones prioritarias para garantizar la recuperación a largo plazo de la ecorregión.
El encuentro forma parte del proceso de Planificación Estratégica del Paisaje de la Ecorregión del Alto Paraná del Bosque Atlántico y contó con la participación y representación de 64 actores de 43 instituciones de Argentina, Brasil y Paraguay de diferentes sectores de la ecorregión del Alto Paraná. En conjunto trabajaron en un diagnóstico sobre la situación de la restauración en los tres países con una mirada multisectorial, así también se identificaron las dificultades y oportunidades para seguir avanzando y potenciar las iniciativas en los tres países.
“Durante el encuentro exploramos nuestras fortalezas y debilidades, para poder potenciarnos juntos y que el Bosque Atlántico en la ecorregión del Alto Paraná esté protegido y conservado, garantizando calidad de vida a las personas, trabajando de manera trinacional”, señaló Taruhim Quadros, representante de WWF- Brasil, organización miembro de la Red. A su vez agregó, “Conectando personas lograremos reconectar el Bosque Atlántico pues, la restauración reúne a las personas y cambia sus vidas, posicionándolas como la esperanza”.
Por su parte, Claudia Amicone, especialista de restauración y comunidad de Fundación Vida Silvestre Argentina destacó que “fue muy enriquecedor haber logrado la participación de todos los sectores que aportaron sus realidades, inquietudes e intereses, en especial las familias rurales y los pueblos originarios, que son quienes habitan el territorio y que suelen quedar por fuera de estos procesos de construcción colaborativa, y donde su voz es clave”. Además, reflexionó “es muy alentador ver que cada vez más personas e instituciones estamos pensando y planificando la recuperación del Bosque Atlántico y los servicios ambientales asociados, algo que hasta hace poco era «pensado», mayormente, por algunas esferas de gobierno y las organizaciones ambientalistas”.
El Bosque Atlántico: Un tesoro de biodiversidad en peligro
El Bosque Atlántico es un auténtico tesoro natural, reconocido mundialmente como uno de los hotspots de biodiversidad más importantes del planeta. Esta ecorregión, que se extiende por Argentina, Brasil y Paraguay, alberga una inigualable diversidad de flora y fauna, muchas de ellas endémicas, amenazadas y en peligro de extinción, como el yaguareté (Panthera onca) y el Águila harpía (Harpia harpyja), entre varias otras.
Con sus 15 ecorregiones terrestres, el Bosque Atlántico es un mosaico de paisajes que van desde selvas tropicales hasta bosques subtropicales, formando un ecosistema único y frágil. Sin embargo, la deforestación y la fragmentación del hábitat han reducido drásticamente su extensión original, poniendo en riesgo la supervivencia de miles de especies y los servicios ecosistémicos que brinda a millones de personas.
La restauración del paisaje se presenta como una esperanza para revertir esta situación, ofreciendo una oportunidad única para recuperar la cobertura forestal, mejorar la calidad del agua, mitigar el cambio climático y fortalecer las economías regionales.
Acerca de la Red Trinacional de Restauración del Bosque Atlántico