La anunciada avalancha de dólares del sector primario, en un año en que se espera que la cosecha de soja alcance un nuevo récord, al superar los 53 millones de toneladas (vs. 32 millones del año anterior), comenzó a darse.
Ayer, las intensas liquidaciones de exportadores en lo que va del año obligaron al Banco Central (BCRA) a comprar en el mercado cambiario más de US$ 110 millones para evitar que caiga el valor del dólar, con el riesgo de volver a tentar a inversores y ahorristas a adoptarlo como un refugio frente a pesos que pierden atractivo por la aceleración inflacionaria.
Según cálculos de los operadores, casi dos tercios de la oferta de divisas respondieron a este fenómeno.
En tanto, el tercio restante lo aportaron los bancos e inversores institucionales locales, que, siguiendo el convite que les realiza el Central ofreciéndoles tasas tentadoramente bajas, prefirieron desprenderse de sus dólares billete y suscribir contratos de futuro para recuperarlos a fin de mes o, a lo sumo, cuando termine abril o mayo.
Se trata, en definitiva, de apuestas que no pasan por alto que arrancó la temporada alta de oferta de dólares, por lo que, ahora más que nunca, el precio del billete estará a merced de lo que determine la autoridad monetaria.
«Hay que tener en cuenta, además, que, aunque no quiera admitirlo, para el Gobierno el uso del tipo de cambio es una de las pocas anclas antiinflacionarias que mantiene», apuntó un avezado agente cambiario, para quien a la oferta de dólares comerciales se sumarán en las próximas semanas los provenientes de un desarme temporal de carteras de inversión corporativas.
Pizarras sin cambios
Con sus sostenidas compras, el BCRA provocó un alza marginal de una milésima en el dólar mayorista vendedor, que cerró a $ 3,859. Mientras tanto, el precio minorista se mantuvo invariable a un promedio de 3,84 y 3,88 pesos para la compra y venta en bancos y agencias del centro porteño.
«Lo que quedó claro es que, de la misma manera en que le pone límites a cualquier intento de suba agresiva, también hace lo propio a la inversa. Así, recupera reservas y les ofrece un tipo de cambio competitivo a los exportadores», observó la casa Puente Hnos. en su habitual informe diario.
«Las fuertes posturas vendedoras que el BCRA puso en los futuros le permitieron completar la faena. Así, deja al dólar en una suerte de encajonamiento operativo y consolida su sistema de flotación administrada», juzgó por su parte Carlos Risso, del portal Zonabancos.com.
DESDE EL LUNES FLEXIBILIZAN EL «CONTADO»
La Comisión Nacional de Valores (CNV) aprobó ayer la circular 3538, que flexibiliza los plazos para las operaciones con acciones o bonos al contado. A partir del lunes, según confirmó el Mercado de Valores (que propició el cambio), éstas podrán ser liquidadas tanto en el mismo día en que fueron concertadas como a 24, 48 o 72 horas. «Este cambio facilitará las operaciones, que podrán ser pactadas en función de sus disponibilidades o necesidades de efectivo», evaluó la CNV. «Recibimos con satisfacción esta aprobación a nuestro pedido que favorecerá la liquidez y el volumen del mercado», ponderó por su parte Pablo Aldazabal, presidente del Merval.
Fuentes La Nación